La situación de semiquiebra de la Generalitat también ha afectado a los programas sociales y de empleo que promueven el Ayuntamiento de Castelló y entidades privadas sin ánimo de lucro. El Consell adeuda al consistorio un millón de euros correspondiente a los planes de reinserción y formación de 2011, según informaron ayer fuentes municipales, mientras los bancos desechan los avales del Gobierno valenciano que ha presentado la asociación de Patim para financiar sus taller de empleo, un hecho que puede provocar su cierre este mes.

El ejecutivo de Alfonso Bataller programó en 2011 un docena de cursos o talleres de reinserción laboral a través de los que contrató a 257 personas. El Consell comprometió tres millones de euros y el ayuntamiento 300.000 para su financiación. A estas alturas, el Gobierno valenciano ha pagado el 60% de su importe, es decir, cerca de dos millones, mientras el millón restante no llegará a las arcas municipales hasta mediados de 2012, según las mismas fuentes.

En materia de empleo, el ayuntamiento ha previsto este año una escuela de formación con un presupuesto de 469.000 euros, un taller de empleo (687.418 euros) y un Consorcio del Pacto Local por el Empleo (193.000). Sus fondos provienen sobre todo de la Unión Europea y del Consell, por lo que todo apunta que los retrasos de la Generalitat obligarán al ayuntamiento a endeudarse para mantener estos programas.

Cabe recordar que el ejecutivo que preside Alfonso Bataller sólo aportará 40.000 euros al presupuesto de 193.000 euros del Pacto Local por el Empleo.

Problemas en Patim

La entidad de Patim ha alertado que cerrará su taller de empleo, que integra a diez personas sin trabajo de más de 25 años, este mes si no encuentra financiación. Hasta ahora, Patim solicitaba un crédito y luego el Consell reintegraba la cantidad adelantada. Para el préstamo presentaba un aval de la Generalitat que los bancos y cajas rechazan en estos momentos.

Ribes plantea destinar 6.000 euros a un viaje vecinal a Bruselas

La concejala de Participación Ciudadana de Castelló, Marisa Ribes, ha planteado utilizar para un viaje vecinal al Parlamento Europeo en Bruselas los 6.000 euros que ha obtenido el ayuntamiento con el Premio de Participación concedido por la Generalitat. La edil propuso esta posibilidad en la comisión permanente del consejo ciudadano, celebrada el pasado miércoles por la tarde, según fuentes presentes de la reunión. Sin embargo, esa idea parece que no cuajará por el actual contexto de crisis económica. De hecho, el propio concejal de Hacienda, José Masip, desechó esta propuesta en el mismo encuentro y explicó ayer a este diario que estos 6.000 euros se deberían destinar a proyectos o entidades de cariz social. El ejecutivo de Alfonso Bataller ha aprobado una serie de ajustes en el presupuesto municipal de 2012, que ha caído un 4%, con el objetivo de reducir su deuda (alcanza los 100 millones de euros) y poner fin a su remanente negativo. Su déficit le impedirá este año promover inversiones con fondos propios. Los presupuestos participativos, por ejemplo, están ligados a la venta de suelo público. j.mestre castelló