La sede del PP castellonense amaneció ayer con desperfectos y pintadas como consecuencia de un acto vandálico registrado la noche anterior. El presidente provincial del partido, Javier Moliner, denunció la "disparatada escalada de presión que está sufriendo el Partido Popular" y relacionó lo sucedido con los escraches a miembros de su organización. También la dirección nacional condenó los hechos y mostró su "indignación" por el "acoso" a políticos del PP por parte de grupos radicales. Tras la denuncia, la Policía recogió indicios y ha abierto una investigación para intentar determinar la autoría.

Los agresores anónimos lanzaron desde la calle dos petardos que rompieron los cristales de dos ventanas. Desde el PP destacaron que los estores interiores son ignífugos y no prendieron, "evitando una tragedia mayor". Además, la entrada fue rociada con un líquido que, según el PP, es ácido, aunque la Policía no lo confirmó. También dejaron una pintada en la fachada con el lema "Som País Valencià".

Los vecinos de los alrededores relataron que los hechos debieron ocurrir pasadas las once de la noche del martes, cuando escucharon petardos, que algunos atribuyeron a una gaiata próxima. Los trabajadores de la sede del PP se encontraron los desperfectos a primera hora de la mañana cuando acudieron a trabajar.

El presidente provincial del partido, Javier Moliner, manifestó que lo sucedido recuerda "a la época dura de la violencia callejera". Según dijo, "es un salto más en la disparatada escalada de presión que está sufriendo el Partido Popular las ultimas semanas. Es consecuencia de la línea ascendente de acoso, en la que desde plataformas radicales se organizan escraches en las sedes del PP, luego en los domicilios particulares de algunos dirigentes y sus familias; en la que, después, un partido presuntamente democrático pide la persecución y acoso domiciliario del presidente de NNGG de Castelló por defender a los jóvenes; y en la que un sindicato llama nazis y fascistas a los jóvenes del partido".

La dirección nacional del PP condenó los hechos y manifestó su "indignación" por el "acoso al que, desde las plataformas más radicales, se está sometiendo a los políticos del PP en sus domicilios y las sedes del partido".

Condena de otros partidos

El PSPV y UPyD remitieron sendos comunicados condenando la agresión a la sede del PP castellonense y rechazando el uso de la violencia.