Desde las aguas del puerto de Borriana han puesto el mundo a sus pies. A base de palazos, tres representantes del Club Regatas Burriana han conseguido codearse con los mejores piragüistas de la Tierra en el Mundial de Velocidad para categoría Master (competidores a partir de 35 años) que se celebró el pasado fin de semana en la localidad portuguesa de Montemor-o-Velho. Paloma Cinto, Jorge Cinto e Isabel González han brillado con luz propia en esta cita que ha supuesto una recompensa no sólo a su calidad, sino también a su devoción por un deporte que les supone todo un sacrificio practicar.

Porque tal y como explicaba Paloma, para poder participar en esta competición, «nos lo hemos tenido que pagar todo nosotros. Hemos tenido que poner dinero para la inscripción, para el viaje, para el alojamiento...». Un verdadero esfuerzo que demuestra el amor que los hermanos que, después de muchos años sin practicar piragüismo, recuperaron su antigua pasión con la creación del Club Regatas Castellón. Pero las dificultades económicas y logísticas en el puerto de la capital de la Plana les condujo a radicarse en el puerto de Borriana y cambiar el nombre a su entidad.

Tras diversos éxitos en Europeos y Nacionales, han visto culminados sus esfuerzos con el oro en K-4 Mixto 200 metros entre 45 y 49 años. «Ha sido impresionante. Íbamos a por la medalla, pero sabíamos que había mucha competencia», señaló Paloma. Junto a Mercedes Cobos y Alfonso Rivas, los hermanos Cinto se coronaban como campeones del mundo. Además, también se colgaron el bronce en la distancia de 2.000 metros.

Un exigente Mundial en el que también participaron representantes de Bulgaria, Canadá, Chile, Dinamarca, Francia, Alemania, Noruega, Polonia, Portugal, Rusia, Letonia, Gran Bretaña,Hungría, Irlanda, Italia, EE UU, Uruguay, Venezuela, Argentina, Australia, Austria, Bielorrusia, Bélgica y Moldavia.

Aparte de las dos medallas sumadas junto a su hermana, Jorge Cinto también se proclamó campeón en el K-2 Mixto 200 metros de 45 a 49 años. Su compañera fue la madrileña Mercedes Cobos. Su cosecha de medallas se completó con un bronce en K-4 masculino sobre una distancia de 2.000 metros.

Por su parte, Isabel González, a sus 62 años de edad, demostró que se encuentra en forma tras lograr tres preseas en las tres pruebas en las que compitió. En su categoría de 60 a 64 años, la palista se colgó dos platas. La primera en el K-2 200 metros femenino donde, junto a la andaluza Paz Bey, finalizó en segundo posición. También acabó en la misma plaza en ek K-2 femenino de 2.000 metros al lado de la misma compañera. Además, también formó parte de un combinado internacional, junto a tres palistas rusos, que le permitió lograr un bronce en el K-4 mixto de 200 metros de distancia.