El conseller de Educacion, Vicent Marzà, dejó ayer entrever que no existe una fecha exacta para el inicio de las obras del colegio Pedro Alcázar de Nules, al asegurar que este proyecto se encuentra entre los «compromisos que adquirió el Partido Popular, pero no planificó». Marzà afirmó que estaban estudiando «en la conselleria que corresponde para que inicien las obras lo más rápidamente posible», insistiendo en que el anterior gobierno valenciano dejó muchos proyectos de estas características «sin concretarlos lo suficiente y nosotros estamos intentando hacerlo».
La de Nules era una de las dos inversiones en materia educativa que iba a asumir la conselleria que ahora dirige Marzà, a diferencia del resto de proyectos prometidos por Alberto Fabra como president de la Generalitat, que se iban a ejecutar, por encomienda de gestión, desde la Conselleria de Infraestructuras.
El colegio Pedro Alcázar de Nules, en barracones desde el año 2007, inició el proceso de adjudicación, tras muchos años de retraso, a principios de 2015, aunque realmente no se concretó de manera oficial hasta la recta final de la legislatura, llegando a coincidir el período de estudio de las ofertas presentadas con las elecciones municipales y autonómicas, lo que demoró la adjudicación definitiva, a la que se habían presentado más de 43 empresas.
Finalmente en julio se concretó esa adjudicación, marcando como fecha para arrancar las obras el 15 de septiembre. Sin embargo, con el inicio del curso, ya se informó al ayuntamiento y a la comunidad escolar de que los trabajos no empezarían antes del mes de octubre, aunque ahora tampoco hay fecha. Por el momento, trabajadores municipales se encargaron de tapiar hace días la puerta que hasta ahora utilizaban los alumnos de primaria para acceder y salir del centro, en previsión de que esa zona quede vallada en la primera fase del proyecto que afectará a la rehabilitación del edificio existente. Además, también se está abriendo una segunda puerta en el patio de infantil.
Avances que no eran tales
Marzà aseguró que éste no es el único caso con esta problemática con que se ha encontrado el nuevo gobierno autonómico. De hecho, en algunos centros educativos se ha tenido que informar de que las cosas no estaban tan avanzadas como se habían prometido «y en algunos casos no existía ni planificación ni proyecto», haciendo referencia, por ejemplo, a las obras que en su día se comprometieron con el Rosario Pérez de la Vall d'Uixó.
