El Villarreal CF aspira a que la Copa del Rey se convierta en un bálsamo para la delicada situación en la que se encuentra. Inmerso en una racha muy negativa de resultados en Liga, el submarino confía en que el torneo copero le permita reencontrarse con la victoria y con su juego pese a las rotaciones que Marcelino García Toral deberá introducir en su equipo debido a las lesiones que azotan al primer equipo.

En su primer partido de Copa de la temporada 2015-16, el plantel villarrealense se desplazará hasta Huesca, donde se enfrentará al cuadro local en El Alcoraz. Este estrena técnico ya que el pasado domingo fue destituido Tevenet y el lunes llegó Anquela al banquillo oscense. La plantilla villarrealense confía en que no se haga bueno el dicho de «a entrenador nuevo, victoria segura» y pueda conseguir un buen resultado que le permita afrontar la vuelta en El Madrigal con algo más de tranquilidad el próximo jueves 17 de diciembre.

Para el encuentro de esta noche, Marcelino acumula bajas considerables. Tantas, que se ha visto en la obligación de citar a dos canteranos como son Pablo Íñiguez y Miguel Llambrich para reforzar la defensa ya que, a las conocidas ausencias por lesión de Bonera y Mario, se ha sumado la sanción que arrastra de la temporada pasada Pina y las molestias de última hora de Rukavina y Víctor Ruiz. De este modo es más que probable que Llambrich ocupe el lateral diestro, que el reaparecido Musacchio forme en el eje de la zaga con Bailly, ya recuperado, y que el otro lateral lo ocupe Jokic. El centro del campo parece donde menos cambios habrá y Bruno, Trigueros, Nahuel y Castillejo podrían mantenerse en la alineación inicial, si bien en el ataque las piezas también están más que justas y Soldado tendría que actuar junto a Samu García debido a las bajas por lesión de Baptistao y Adrián, y las molestias de Bakambu.

La lista de Marcelino es bastante corta a estas alturas de la temporada, pero jugará casi en las mismas condiciones que su rival de esta noche ya que Anquela tiene la baja segura del portero Leo Franco y las dudas hasta última hora de José Gaspar, Cristian Fernández y Luis Fernández.

El Villarreal, pese a enfrentarse a un rival de Segunda División y pese a la situación en la que afronta el encuentro, confía plenamente en sus posibilidades y sueña con repetir una participación similar a la de la pasada campaña cuando llegó hasta las semifinales del torneo copero y quedó apeado de la final al caer contra el que acabaría siendo el campeón, el FC Barcelona. Ese es el objetivo y conseguir una victoria esta noche, un bálsamo.