Benicarló y Vinaròs han trabajado de manera conjunta para establecer sinergias entre ambos municipios y poder optar a una mejor posición dentro de la solicitud de Fondos Feder europeos, ya que con la suma de los habitantes de los dos municipios la ambiciosa propuesta confeccionada dentro del ámbito de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado del área urbana de Benicarló-Vinaròs (DUSI), permitirá que puedan acceder a un cómputo global de 30 millones de euros, la cantidad económica que Europa propone para ciudades de más de 50 000 habitantes que presenten un proyecto a estos fondos. Posteriormente, esta cantidad económica quedaría repartida entre las dos localidades cubriendo las necesidades más acuciantes en diferentes ámbitos. Con este argumento se ha trabajado desde ambos consistorios, «un hecho insólito», como remarcaron durante la rueda de prensa de ayer, que muestra un trabajo pionero en cuanto a la colaboración conjunta entre localidades, y para el que se ha contado con la ayuda de 4 empresas con el objetivo de formar un equipo que pudiese presentar la estrategia conjunta, siempre en líneas generales, dentro del plazo marcado por los citados fondos europeos.

El Ayuntamiento de Benicarló acogió ayer la presentación de este proyecto conjunto con la presencia de los dos alcaldes, Xaro Miralles y Enric Pla, así como del edil de Urbanismo de Vinaròs, Jan Valls, y los diferentes técnicos especializados que han contribuido a llevar a buen puerto la iniciativa, tanto del consistorio como Nuria Benítez, como de representantes de las empresas que lo han hecho posible, en el caso de Marisa Calvet y Andrea Escrivà.

Un total de 16 retos prioritarios

Una iniciativa que ha costado 15.000 euros a cada consistorio y que permitirá optar en el caso de su aprobación a los 30 millones de euros que serán destinados a emprender diferentes medidas que las distintas mesas ciudadanas dirigidas precisamente a formular demandas urgentes han establecido como prioritarias. Un total de 16 retos que incluyen actuaciones en aspectos como la demografía, los servicios sociales, el medio ambiente o la economía y de los que se han extraído los principales objetivos temáticos. En este sentido, se han divido en varios los sectores que merecen una atención especial. En el caso de Benicarló, los fondos se destinarían a inversiones para recuperar el casco histórico de la ciudad y ponerlo en valor, o en el caso de Vinaròs proteger la ciudad de inundaciones, que pueden ir a peor a consecuencia de desórdenes producidos por el cambio climático, cada vez más presente. Otros aspectos genéricos a tratar son reducir el consumo energético, mejorar la calidad del aire, adaptar las ciudades a las necesidades de la gente mayor, generar un entorno económico, social y cultural que cree oportunidades para los jóvenes o evitar la degradación de zonas urbanas, entre otros.

Las propuestas surgidas de la ciudadanía en un ejercicio «sorprendente» de participación ciudadana, solo telemáticamente, han alcanzado las 118 propuestas.

La aprobación del proyecto conjunto podría ser anunciada a lo largo de abril o mayo, y marcaría un inicio para poder obtener unos fondos que posteriormente serían diferenciados dependiendo las necesidades de las dos localidades. Seis grandes bloques son las aplicaciones principales hacia las que van encaminadas las medidas que defiende Europa en una estrategia que puede alargarse hasta el año 2020, un crecimiento inteligente, un crecimiento sostenible y un crecimiento integral, pautas que se están reforzando en la construcción de un modelo de ciudad más humana y sostenible.