Tras la asamblea realizada el pasado 3 de junio, la Asociación Amigos del Ribalta puso de manifiesto que «los puntos más simples» de los veintiséis incluidos en el programa presentado al Ayuntamiento de Castelló han sido cumplidos o están en proceso de realización, mientras que los de mayor necesidad no han sido tratados. Además, señalaron la necesidad de modificar la estructura del Consejo Social.

De esta forma, afirmaron que se ha modificado el sistema de riego, utilizando el agua del estanque, por lo que ahora ésta «es renovada con mayor rapidez». También señalaron la ampliación de la zona de juegos infantiles y la dinamización cultural del área, así como la plantación de 1.000 nuevos setos, lo cual, en su opinión, «vista la carencia es inapreciable». Por otro lado, resaltaron que se ha tramitado la retirada de las señales de TRAM y de semáforos, que se ha comunicado a la Policía la prohibición de circular vehículos por el andén central y que se está estudiando «la creación de recorridos botánicos y culturales con los correspondientes carteles informativos».

Sin embargo, destacaron que es necesaria la creación de una Ordenanza Municipal de zonas verdes y arbolado urbano, la cual utilizan «casi todas las ciudades medianas y grandes para proteger estas áreas«. Ante esto, también señalaron la necesidad de incluir el Ribalta en la lista de jardines históricos de la Carta de Florencia, creada por la asociación Icomos en 1982, lo cual daría «prestigio» a los «valores históricos y artísticos» del parque. En esta misma línea de actuación, propusieron la creación de folletos para información turística y la de guías para las visitas a los colegios, medidas «que no supongan mucho dinero pero que permitan recuperar el parque».

Por otro lado, señalaron la necesidad de cambios en el Consejo Social de la ciudad, ya que «la estructura con la que funciona no tiene nada de democracia en la misma y se regula y responde específicamente al servicio de las fuerzas políticas que gobiernan puntualmente». De esta forma, afirmaron que el papel del consistorio para con el Consejo Social debe ser el de «dar un local y una estructura» pero «sin formar parte de él». Así, según comentaron, se conseguiría «trabajar con independencia».

Problemas a nivel provincial

La asamblea también hizo constar que se pondrá en conocimiento de los responsables pertinentes la situación del humedal de la Cuadra de Santiago en Benicàssim, que está «siendo abandonado y con peligro de desaparición sin que las autoridades tomen medidas de protección y recuperación». Del mismo modo, manifestaron su apoyo a Gecen para el cambio del proyecto de la Línea de Muy Alta Tensión (MAT).