El destino en muchas ocasiones es caprichoso y este año ha querido que el Villarreal CF se enfrente a una situación idéntica a la de la pasada temporada en la Liga Europa. Si en la campaña 2015-16 los villarrealenses se vieron la cara con el Nápoles en dieciseisavos de final, en esta es la Roma el rival al que los futbolistas que entrena Fran Escribá tendrán que eliminar para seguir con vida en la competición europea.

Pero las casualidades van más allá ya que el plantel napolitano ocupaba la segunda posición en la clasificación del Calcio cuando se enfrentó al submarino y el conjunto romano llega este jueves al Estadio de la Cerámica en idéntica situación. En aquella eliminatoria, el 18 de febrero de 2016 el Villarreal se impuso como local en su estadio en la ida de la eliminatoria por 1-0 con un gol de Denis Suárez.

Una semana después, en la capital italiana, el Villarreal recibió pronto el 1-0 marcado por Hamsik, que igualaba la eliminatoria, pero en el minuto 59 un disparo lejano de Pina puso el empate a uno que clasificó al equipo que por aquel entonces entrenaba Marcelino García Toral.

Previamente, el Villarreal se había clasificado como segundo de su grupo por detrás del Rapid de Viena y por delante del Viktoria Pilsen y el Dinamo de Minsk. Y, de nuevo, este año se ha repetido situación ya que los amarillos superaron la fase de grupos como segundos (9 puntos), por detrás del Osmanlispor (10) y por delante del Zurich y el Steaua de Bucarest (6 puntos cada uno).

Tras eliminar al Nápoles el curso pasado, el siguiente rival fue del Villarreal en octavos de final fue el Bayern Leverkusen, al que doblegó con un 2-0 en casa y consiguió un empate sin goles a domicilio. Mientras, en cuartos de final el submarino ganó los dos partidos al Sparta de Praga, por 2-1 en casa y por 2-4 a domicilio.

En las semifinales el Villarreal se despidió de la competición, ya que aunque empezó con una victoria en El Madrigal ante el Liverpool, cayó en la vuelta por 3-0 en Anfield Road.

Sin lugar a dudas, superar la eliminatoria de las dos próximas semanas contra la Roma es un objetivo prioritario para la entidad que preside Fernando Roig al que, tras caer en la fase previa de la Liga de Campeones el pasado mes de agosto, aspira a protagonizar un campaña similar en Europa a la del año pasado.