El área de Turismo de Alcalà de Xivert-Alcossebre puso en marcha dos rutas por ambos núcleos poblacionales a través de los árboles de interés local que forman parte del catálogo botánico municipal que incluye los ejemplares más destacados según sus características históricas, dimensiones de la altura y porte, carácter emblemático, singularidad o interés botánico y paisajístico.

Cada ejemplar o conjunto arbolado cuenta con carteles informativos que aportan datos como especie, origen y motivos de protección. Además, se han editado folletos en varios idiomas con los dos recorridos propuestos para el casco urbano y en el núcleo costero.

La ruta a pie de los árboles de Alcalà de Xivert comienza por el olivo de la plaza de la Iglesia. Este magnífico ejemplar de variedad «farga» se trasplantó a la plaza en el año 1993 y forma parte de una de las estampas más características del municipio. Con la iglesia de Sant Joan Baptista y el Campanar de fondo, este ejemplar corona esta amplia y céntrica plaza del casco urbano.

La siguiente parada es la calle Mare de Déu del Tremedal, donde un emblemático olmo da la bienvenida a los vecinos y visitantes que acceden a Alcalà de Xivert por la entrada oeste. Fue plantado en la década de los años treinta del siglo pasado.

El recorrido continúa con los noventa cipreses situados en el cementerio, algunos de los cuales alcanzan los 20 metros de altura. El ciprés es una especie originaria de la cuenca mediterránea, muy popular en los municipios valencianos por su interés histórico, emblemático y cultural. En la estación del ferrocarril de la calle Héroes de Marruecos existe un conjunto de tres alcornoques.

La ruta propuesta, que puede hacerse tanto a pie como en bicicleta, finaliza en el Calvario. Aquí se halla un conjunto de 32 cipreses que ocupan una superficie aproximada de 1.890 metros cuadrados y un imponente olivo con una altura de 8'5 metros.

En bicicleta

La ruta botánica de Alcossebre está pensada para hacerse en bicicleta. El recorrido comienza en la ermita de Sant Antoni de Cap i Corb con un conjunto de árboles jóvenes con tres cipreses y cuatro cinamomos.

En este primer tramo encontramos varios eucaliptos en la intersección entre los caminos Vora Riu Sant Miquel y l'Atall y la morera de las escuelas. En Tres Playas tenemos un palmito, una especie autóctona europea de la que, tradicionalmente, se han aprovechado sus hojas para la fabricación de escobas, capazos o sombreros. Cerca encontramos la maquia litoral de la Roca del Moro, un ecosistema mediterráneo.

Llegamos al paseo Vista Alegre y detrás de la oficina de Turismo encontramos un pinar formado por un grupo de pinos de tronco tortuoso a primera línea de mar, en un conocido parque situado junto a este transitado paseo litoral.

En el parque de la calle Ametler tenemos un grupo de algarrobo. Son los supervivientes de una época en que el cultivo de secano era fundamental en la economía de la zona. La ruta de Alcossebre finaliza con los ejemplares autóctonos del conjunto arbolado, con árboles y arbustos, del paseo de Las Fuentes.