Los robos en masías dispersas están al orden del día. Tal es así, que una masía de Culla ha sido víctima de varios robos en los últimos meses. Sin embargo, el último de ellos no tuvo consecuencias materiales para el propietario, ya que fue interrumpido por un grupo de vecinos.

La vivienda, que actualmente no se usa como residencia habitual, es utilizada por su propietario como almacén de productos para la construcción. Así, varios vecinos vieron una furgoneta sospechosa en la entrada de la vivienda y se acercaron a preguntar a sus ocupantes. Estos señalaron que habían ido a la zona a buscar leña pero, tras varios minutos de conversación, los vecinos notaron que en las bolsas que portaban no había leña sino material del almacén. Para evitar la huida de los ladrones, bloquearon la salida de la furgoneta con un vehículo propio y llamaron a la Guardia Civil. Para evitar ser detenidos, dos de los presuntos ladrones salieron corriendo de la furgoneta y llegaron hasta otro vehículo que les recogió y sacó de la escena.

Hasta el lugar del suceso acudió la Guardia Civil de Benassal. Los agentes detuvieron al tercer hombre, de edad avanzada, que todavía seguía en la furgoneta y no había logrado huir. El caso se encuentra en manos de la Benemérita quien investiga lo ocurrido. Cabe señalar que los agentes hallaron en el lugar la cartera con los documentos de identidad de uno de los presuntos ladrones huidos así como material del almacén, correspondiente a varios robos, escondido entre matorrales.