Tres caras conocidas hay en la plantilla del Fuenlabrada, próximo rival del Villarreal B en la segunda fase de la eliminatoria por el ascenso a Segunda. Uno de ellos es Marcos Gullón, centrocampista madrileño que llegó a las categorías inferiores con 14 años y salió con 23. «Guardo muy buenos recuerdos. Lo importante es que allí me formé como futbolista y como persona», destacó. «Ahora todo ha cambiado. El Villarreal es otra historia, como potencial del equipo y como estructura del club», agregó.

Marcos Gullón Ferrera (Madrid, 20 de febrero de 1989) jugó nueve temporadas en la cantera del club de la Plana Baixa. Dos en Segunda División con el primer filial, con el que logró el ascenso desde Segunda B. E incluso llegó a debutar en Primera con el primer equipo de la mano de Juan Carlos Garrido, en el campo del Racing, en el Nuevo Sardinero (2-2), un 27 de febrero de 2011. E incluso debutó en la Liga de Campeones contra el Manchester City.

Se enfrentará ahora a un Villarreal B en el que no queda ningún compañero de su etapa más joven de amarillo. «Estamos empezando a ver vídeos de ellos. Sabemos que es un filial con más pegada y mucho más manejo en las dos áreas que nuestro anterior rival, la Real Sociedad B, que tenía más control en el centro del campo, más posesión», destacó Marcos Gullón.

Está con la cabeza puesta en el partido de este sábado (18.00 horas) en el Fernando Torres, en la ida. «Esperamos cumplir el guión que tenemos en mente, para llevarnos un buen resultado para el partido de vuelta en el Mini Estadi», destacó el experimentado mediocentro que se ha recuperado de una lesión que le ha mantenido alejado de los terrenos de juego varios meses. De hecho, esta temporada sólo ha jugado seis partidos, con 403 minutos.

Marcos Gullón abandonó la disciplina del Villarreal en verano de 2012. Luego estuvo tres temporadas en el Racing de Santander, dos y media en el Paollon (Chipre), una y media en el Roda (Países Bajos) y desde el verano pasado en el Fuenlabrada.