Siempre se ha parido en casa, con la ayuda de parteras y médicos de confianza. Conforme la ciencia fue avanzando y se desarrollaron nuevas técnicas y protocolos, el porcentaje de partos domiciliarios fue descendiendo rápidamente para dar paso a los hospitalarios.

Llevamos unos años en los que la práctica hospitalaria en los partos está siendo muy criticada y la figura de las doulas se ha extendido y profesionalizado. De este modo, se ha creado una discrepancia entre las personas que defienden el parto en casa y las que lo critican. Como término intermedio, puesto que los partos domiciliarios no están cubiertos por la seguridad social, se están preparando las maternidades con salas menos medicalizadas y más humanizadas, donde el ambiente es más cálido, se facilitan diferentes maneras de transcurrir el trabajo de dilatación, así como el propio parto.

Para los partos en casa se han establecido unas condiciones básicas de seguridad (guía de asistencia al parto elaborado por el Colegio Oficial de Enfermería de Barcelona para matronas), como que sea un parto dirigido por profesionales, con los que se contacta previamente para tener buen conocimiento de la situación; que sea un embarazo y parto no de riesgo (sin complicaciones previas ni durante el parto en la salud del bebé ni de la madre gestante), que sea gestación de un solo bebé; que haya un hospital cercano y de fácil acceso, ante posibles complicaciones y que sean partos entre las semanas 37 y 42, descartando los partos de bebés prematuros.

Con estas condiciones se analizaron los partos atendidos entre 1995 y 2009 y no se observaron diferencias en el índice de mortandad de estos bebés si habían nacido en casa o en un centro sanitario, lo que descarta los riesgos que tan fácilmente se asocian al hecho de dar a luz en casa (siempre y cuando se sigan las condiciones de seguridad mencionadas), aún así, según datos de 2010 facilitados por Educer, en España solo el 0,17 por ciento de los partos se practica en el propio domicilio (1 de cada 600).

Yo soy de la opinión de que sumar opciones es dotar de libertad y valor cualquier cosa, por lo que me parece estupendo que se profesionalice y se asegure el pleno cumplimiento de las medidas de seguridad necesarias para que el parto transcurra de la manera más cómoda, fiable y personal, así como que las maternidades se quieran parecer, cada vez más, al ambiente de un hogar, combinando así la seguridad médica con la emocional.