Hoy se pone en marcha el primer equipo del CD Castellón con las miras puestas en ver si logra, de una vez por todas, iniciar la 'operación despegue'. Ya se ha tocado fondo (el equipo es colista del grupo III de Segunda División B) y ahora todo es mejorable. Pero, para conseguir enderezar el rumbo, es necesario ganar. Y ahora llegan dos desplazamientos difíciles para los jugadores del equipo de la capital de la Plana. El Rico Pérez es la próxima estación y ese es un campo de no muy buenos recuerdos para los orelluts. Es cierto que se ganó en la última visita, jugando en Segunda División, por 0-2 en el feudo del Hércules, pero los precedentes no invitan al optimismo y menos en la situación en la que se está a día de hoy.

Hasta en treinta y dos ocasiones se han enfrentado estos dos equipos en la capital de la Costa Blanca entre Primera División (tres), Segunda División (diecinueve), Segunda División B (seis), en Tercera División (una) y en la Copa del Rey (tres). Esos treinta y dos precedentes se saldaron con solo siete victorias para el CD Castellón, doce empates y trece triunfos para el Hércules.

Son dos equipos que quieren resurgir de sus cenizas. Los alicantinos llevan varias temporadas intentando regresar al fútbol profesional, pero se les resiste. Y en el caso de la escuadra castellonenses quiere hacerlo después de purgar sus miserias durante siete temporadas en Tercera División. Ahora, de regreso a la división de bronce, las cosas no han empezado como todos querían y el panorama es desolador, sin haber ganado un partido después de once jornadas y, por si eso no fuera poco, el equipo es colista en Segunda B por primera vez en su historia.

Sin lugar a dudas, nadie esperaba que a estas alturas de la temporada 2018-19 el plantel de la capital de la Plana ocupara la última posición de la clasificación cuando se había dicho que el objetivo era subir o, como mínimo, disputar la promoción de ascenso a Segunda A.

Árbitro. El colegiado Ricardo Escudero Marín, de 33 años, arbitrará el domingo el Hércules-Castellón. Séptima temporada en Segunda B, con 86 partidos, con 40 triunfos locales, 21 empates y 25 victorias visitantes. Ha mostrado 541 amarillas y 44 rojas.