El exalcalde de la Vall d'Uixó y diputado nacional del Partido Popular por la circunscripción de Castelló, Óscar Clavell, aseguró este miércoles tras comprobarse la existencia en el cementerio municipal de un nicho vacío con el nombre de una persona al parecer inexistente, que en su época como primer edil la «prioridad» que siempre tuvo era «trabajar por los vivos».
Desde el Ayuntamiento socialista de la Vall d'Uixó atribuyen el hecho del nicho vacío, el 46 del camposanto y tras una lápida con un nombre fantasma, a intereses electorales de Óscar Clavell, al que acusan de incumplir la ordenanza del cementerio que regula el orden de enterramiento y ordenar uno falso para que terceras personas se beneficiaran de una mejor ubicación de sus muertos.
A preguntas de los medios en el Congreso, Clavell explicó tras dos días en silencio que «en estos momentos hay una empresa con 154 trabajadores que se van a la calle y me gustaría que todo el tiempo invertido por el actual equipo de gobierno fuese dirigido a esas personas y no a cosas que por dos veces, primero por Fiscalía y después por el juzgado, fueron archivadas», en alusión al cierre de la investigación judicial por esta causa.
El diputado 'popular', que aseguró que a él «nunca» se le ha culpado de nada, ha negado ser quien cometió el error de registrar al muerto en el nicho.
El Ayuntamiento de la Vall d'Uixó (La Plana Baixa) comprobó el pasado lunes la existencia en el cementerio municipal de un nicho vacío con el nombre de una persona al parecer inexistente, un hecho que achaca al anterior equipo de gobierno del PP, al que acusa de, por intereses electorales, saltarse el orden de enterramiento establecido y que terceras personas se beneficiaran de una mejor ubicación para sus muertos.
Silencio también en el pleno
El enterramiento falso ordenado por el anterior alcalde sobrevoló el pleno ordinario del Ayuntamiento de la Vall d'Uixó celebrado ayer por la tarde, aunque finalmente no hubo ninguna referencia, a excepto del concejal de Som la Vall, la marca local de Podemos. El portavoz, Óscar Langa, quiso saber por boca de la alcaldesa en el turno de ruegos y preguntas cómo se habían sentido al comprobar que el nicho, efectivamente, estaba vacío. Al respecto, la primera edil, Tania Baños, apuntó que fue «una situación sabida». Es decir, que la falta de finado confirmó las sospechas del equipo de gobierno.
Por su parte, Clavell mantuvo silencio también en el turno de intervención del público. En el pleno de la Vall d'Uixó, fuera de orden del día y por tanto sin validez legal, los ciudadanos pueden preguntar a los concejales por aquello que consideren. Así, un asistente preguntó al concejal y diputado Óscar Clavell si quería dar explicaciones por el caso del enterramiento falso y este, se negó.
De hecho, llama la atención que los pormenores de la situación en la que queda el nicho, a la venta por 200 euros por segundo uso cuando uno nuevo está valorado en 1.000 euros, fueron contestadas por la primer edil, Tania Baños. Indicó, por ejemplo, que no existe factura del pago del nicho y aseguró desconocer el pago en la funeraria por la lápida. También se opuso a dar el nombre del personal funcionario que intervino en el proceso, una de las cuales se negó de forma tajante ante Clavell a firmar el enterramiento porque, según declaró a la jueza, era consciente de la clara ilegalidad que le solicitaba.
