El centrocampista madrileño Rubén Ramos, fichado en enero procedente del Internacional de Madrid, dijo tras la derrota ante el Espanyol B en Castalia que «solo hay que pensar en ganar ante el Ebro» y se lamentó del traspié del domingo contra el filial. El futbolista se mostró convencido de que «nos vamos a salvar seguro y hay que olvidar esto y pensar en mañana, y el mañana es el próximo partido».

Rubén Ramos fue el autor del 1-2 desde el punto de penalti, gol que puso de nuevo al equipo albinegro en la pelea por el empate aunque este no llegó a materializarse. «Es cierto que no estuvimos bien en la primera parte y estuvimos muy bien en el segundo tiempo. Se nos quedó un mal sabor de boca», concluyó.