«Ahora, más que nunca, hemos de estar aquí. No podemos dejar que haya políticas que nieguen presupuesto para igualdad o que descalifiquen la diversidad sexual», afirmaba Mavi Oliver, portavoz de la plataforma feminista de Castelló durante la manifestación reivindicativa del 8 de Marzo que recorrió por la tarde el centro de la capital de la Plana. Más de 10.000 personas, según la Policía Local, asistieron a una de las marchas más multitudinarias de la ciudad que se recuerdan de los últimos años.
Un alud de castellonenses se plantaron contra el machismo y censuraron a los nuevos posicionamientos políticos que cuestionan el feminismo y la ley contra la violencia de género. Fue tal la afluencia que los asistentes ocuparon prácticamente todo el itinerario, desde la plaza María Agustina hasta la plaza Mayor, pasando por las calles San Luis, Ruiz Zorrilla, Puerta del Sol, Falcó, plaza de la Paz, calle Mayor y plaza Santa Clara.
La asistencia quintuplicó las cifras de 2018, un incremento que denota un resurgimiento con fuerza del feminismo, alentado al parecer por los movimientos políticos que cuestionan en los actuales tiempos sus principios de igualdad. La protesta dio un espaldarazo al reto de la igualdad y reforzó sus reivindicaciones frente al machismo. «Ni un pas enrere» fue una de las frases que se pudo leer y escuchar, mientras la manifestación alcanzó su punto álgido en la plaza Mayor, cuando se puso a gritar al unísono «nosaltres parim, nosaltres decidim».
La manifestación fue muy transversal; se pudo ver a grupos de personas de todas las edades y de diferentes nacionalidades. Del arco político hubo representantes de todos los partidos de izquierdas, caso del PSOE, Compromís, Podem o EU, entre otros, la propia alcaldesa de al ciudad, Amparo Marco. También estuvieron presentes los sindicatos de Comisiones Obreras, UGT, Intersindical Valenciana o la CGT, así como colectivos estudiantiles y feministas. Eludieron participar dirigentes del Partido Popular, que durante la mañana acompañaron a Pablo Casado en un acto de precampaña en Castelló, ni de Ciudadanos.
Mavi Oliver, portavoz de la plataforma feminista de Castelló, destacaba la notable presencia de gente joven. «Es muy importante que tantos jóvenes se hayan incorporado. Nosotras damos las gracias a nuestras antepasadas y ahora vemos que tenemos relevo», afirmaba Oliver, que encabezaba una performance contra los asesinatos machistas denominada «zona de las ausentes». Este espacio estaba integrado por cinco hombres que con la cara tapada portaban pancartas con los nombres de las mujeres asesinadas por violencia de género en los últimos años.
«No a la violencia de género, sí a la igualdad», «soy libre, soy fuerte, soy valiente», «vives, lliures, unides» o «sororitat contra el patriarcado» fueron otros de los mensajes lanzados en la marcha.
La manifestación fue el colofón de una jornada el 8M marcada por la huelga feminista. Al mediodía también hubo una concentración en la plaza Santa Clara. La huelga, según CC OO, tuvo un seguimiento del 70 % en la enseñanza y en la justicia, donde se había convocado una parada de 24 horas. En otros sectores como la industria, el comercio o sanidad se programaron paros de dos horas. CC OO de Castelló, destaca que en la industria dejaron de trabajar dos horas un 25 % de trabajadoras, una cifra importante, afirma su secretario general, Manel Nieto, teniendo en cuenta que se trata de un sector «masculinizado». En el sector servicios el seguimiento fue también de en torno a un 20 %, según el mismo sindicato.
CS pide respeto
La portavoz de Ciudadanos (Cs) en Castelló, Cristina Gabarda, pidió «respeto por la elección individual de las personas en la participación en los actos del 8 de Marzo.
