El alcalde de Vila-real, José Benlloch, y el secretario autonómico de Agricultura, Francisco Rodríguez Mulero, se reunieron ayer con diferentes entidades agrarias de la ciudad para trabajar de forma conjunta en la búsqueda de soluciones para el difícil momento que atraviesa el sector y encauzar su futuro.
Así lo dieron a conocer el alcalde y el secretario autonómico tras el encuentro, que se celebró en la Casa de l'Assut del Termet, en el que también estuvo presente el concejal de Agricultura, Medio Ambiente y Cambio Climático, Josep Pasqual Sancho; el director general del ramo y el delegado del Consell en Castelló; la Comunitat de Regants, representada por su presidente, Pasqual Broch, y diferentes representantes del sector, entre ellos miembros de las diferentes cooperativas de la ciudad.
«Además de mostrarles a nuestros invitados nuestro Assut y su historia, ya que es una infraestructura hidráulica imprescindible a lo largo de la historia de nuestra ciudad y que llega a otras zonas de la comarca, hemos podido escuchar de primera mano las necesidades del sector y también les hemos explicado todas las gestiones que se están haciendo y los intentos de dar solución a la crisis que tanto les afecta», afirmó Benlloch.
Por su parte, Rodríguez Mulero señaló que «hemos vivido una campaña muy mala y hay que reconocer que tenemos problemas coyunturales y estructurales que debemos abordar mediante reformas para dar soluciones». Asimismo, apuntó a la dureza de la actual edición, ya que «nuestra variedad reina, que es la clementina, el principal cultivo que tenemos en Vila-real y en toda la Plana, lleva varios años con problemas, tanto en la comercialización, como debido a la competencia con otras variedades y con campañas cortas que arrojan resultados negativos».
En este sentido, Rodríguez Mulero de manifiesto algunas de las medidas aplicables, como la reforma de la Ley de Estructuras Agrarias de la Comunitat Valenciana o la inclusión de criterios de viabilidad económica y social para las explotaciones agrarias, ya que «está siendo un sector poco viable y si no se reestructura su actividad, está abocado al fracaso».
Por este motivo, explicó que «estamos analizando la problemática específica de Vila-real y de la zona y juntos buscamos soluciones e iniciativas que respondan a las necesidades de agricultores, regantes y la propia Administración, con el objetivo de encauzar un futuro que estamos seguros que será cierto para la actividad agraria de este entorno y para que los jóvenes vuelvan a tener ganas de incorporarse a este sector».
El secretario autonómico también destacó el trabajo que se ha llevado a cabo desde el Ayuntamiento de Vila-real. «La preocupación que ha mostrado el consistorio y también la comunidad agraria de Vila-real nos ha llevado a intentar dar solución a lo que necesitan, aunque bien es cierto que la citricultura en general está en un momento crítico, con una crisis que no es de ahora y hay que reaccionar para adaptarnos a la situación y ser más competitivos», afirmó, al tiempo que añadió que «Vila-real -y la zona de la Plana- se ha implicado en la modernización y eficiencia del regadío, con inversiones importantes».
