El municipio de Vila-real reunió ayer a vecinos, peñistas y visitantes de la provincia para celebrar en las calles la 'Nit de la Xulla', donde el color, la música y un especial olor a carne a la brasa fueron los protagonistas de esta tradicional fiesta. Además, este año ha sido especial ya que se ha declarado Fiesta de Interés Turístico Provincial y contó con la presencia del presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig.
La 'Nit de la Xulla' celebra este año su cuarenta aniversario en el municipio. Esta tradición se instauró oficialmente en1979 mientras se encontraba al frente de Vila-real el alcalde Bautista Carceller. Desde entonces la tradicional xulla forma parte de las fiestas patronales de Sant Pasqual y de la Mare de Déu de Gràcia.
Conchita Ibáñez, de la asociación Amas de Casa, recuerda la xulla como algo que se ha hecho durante toda la vida, «lo recuerdo desde pequeña en la calle, varios barrios lo han celebrado siempre y luego Carceller lo incorporó a las fiestas, siempre ha sido una tradición». Asimismo, para ella es muy importante el reconocimiento que la Generalitat les ha otorgado, «para nosotros es muy importante, esto es algo de toda la vida y nos gusta que se haya reconocido».
Ayer los vecinos del municipio iluminaron las calles con las hogueras y las llenaron de música y ambiente, donde los vila-realenses se juntaron para degustar las típicas parrillas de carne. Lo más elegido entre los asistentes fueron las chuletas de cordero, las longanizas, las morcillas, las caretas de cerdo y la panceta. Cada uno elige como prefiere la carne, si a la brasa o cocinada al horno, como se hacía tradicionalmente. «La xulla de toda la vida es una cazuela de barro con patatas y chuletas de cerdo al horno» afirma Ibáñez.
El día de la xulla ha pasado a ser uno de los más importantes de las fiestas patronales, ya que se ha convertido en un acto multitudinario y destacado, donde se reúne toda la población de Vila-real, incluso vecinos de otros municipios de la provincia se acercan para disfrutar de esta fiesta.
Asimismo, a lo largo del día, los vecinos del municipio pudieron disfrutar de actividades muy diversas, desde la entrada de vaquillas a las 12.30 horas hasta la posterior suelta de vaquillas en la zona de cadafals, que transcurrieron con normalidad. A las 18.00 horas los amantes del flamenco pudieron disfrutar de un tardeo con el grupo Sierra en la calle Creus Velles.
Tras finalizar la elaboración de alioli, los vila-realenses comenzaron la tan esperada xulla. La Asociación de Pensionistas y Jubilados La Murà y El Prado también celebraron la xulla seguida de un baile para que disfrutaran los más mayores. La noche puso su punto y final con el musical 'We love Queen' a las 23.45 horas en la plaza Major y la Fiesta Diez en el Recinto de la Marxa prevista a la 01.00 horas.
Ayer fue el cuarto día de las fiestas patronales para los vecinos de Vila-real y uno de los más importantes.Este fin de semana el municipio ha podido disfrutar de un amplio programa lleno de torneos, concursos, actuaciones musicales y los conciertos de grupos como La Fúmiga, Zoo, Los Makis o Blas Cantó. A los vecinos de Vila-real todavía les quedan seis días por delante para acabar de disfrutar al máximo todas las actividades que ofrecen las fiestas de Sant Pasqual y esperar con ansias a que lleguen las fiestas de la Mare de Déu de Gràcia.
