La Coordinadora Valenciana de ONGD denuncia de nuevo que, a pesar de las reuniones mantenidas con el alcalde José Benlloch, de las reiteradas peticiones de solución y de las denuncias públicas realizadas en el último año por parte de esa entidad, el Ayuntamiento de Vila-real sigue debiendo a las ONGD cerca de 50.000, y mantiene bloqueadas desde 2017 las partidas presupuestarias del consistorio destinadas a los proyectos de cooperación con los países más empobrecidos.

Tras la denuncia de «dejación de funciones» realizada por la Coordinadora hace seis meses, el alcalde de Vila-real, José Benlloch, recibió a la Coordinadora Valenciana de ONGD en marzo pasado. En esas reuniones, Benlloch se comprometió personalmente a que, antes de las elecciones municipales, se abonarían las cuantías que se deben a las ONGD desde hace casi cuatro años, y que las organizaciones solidarias tuvieron que adelantar de sus fondos propios, según aseguró ayer la entidad.

También prometió que se abonarían los fondos aprobados en los presupuestos municipales de 2017, y se aprobaría la convocatoria pendiente de ayudas correspondientes a los presupuestos de 2018 conjuntamente con las previstas para 2019. En este sentido, la Coordinadora denuncia que esas promesas no se han cumplido. «Hemos esperado prudentemente a que se celebraran los comicios para dar un margen de acción al ayuntamiento, pero ya no podemos esperar más, porque está en serio peligro la continuidad de proyectos que tradicionalmente se han apoyado desde Vila-real en países como Senegal, Túnez, la India, Colombia, Paraguay, Guatemala, El Salvador y Nicaragua. En ellos se trabaja principalmente con mujeres e infancia de comunidades empobrecidas para mejorar la atención sanitaria, la educación y la producción de alimentos», explicó Esther Pamplona, portavoz de la Coordinadora Valenciana de ONGD en Castelló.

«Lo dijimos hace seis meses y lo reiteramos ahora: lamentamos profundamente que uno de los municipios valencianos que había destacado históricamente por su solidaridad, que destinaba el 0,7% de sus ingresos propios a cooperación internacional incluso en los momentos más difíciles, lleve años paralizado en esta materia. Las promesas que se nos hicieron no eran ofertas electorales, sino que eran compromisos que deberían haberse cumplido ya antes de las elecciones, y no se han hecho», reiteró Pamplona.

Fira de la Solidaritat

Mientras no se resuelva esta situación, las ONGD que forman pare de la Coordinadora Valenciana de ONGD no le ven sentido a la convocatoria que han recibido para participar en la organización de la Fira de la Solidaritat que tradicionalmente organiza el ayuntamiento en otoño, y así se lo han comunicado formalmente al alcalde por carta. «Nos parece casi una burla que se nos invite. Si de verdad está comprometido con la solidaridad, lo que tiene que hacer es cumplir», concluyeron.