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Los municipios de la Ribera por donde discurre la AP-7 pueden presumir de no tener ninguna cuenta pendiente con el Estado. Almussafes, Algemesí, Corbera, Llaurí y Favara hace dos años (algunos incluso cuatro, como Almussafes que ingresan el IBI por el paso de la autopista por sus términos municipales. Albert Girona, alcalde de Almussafes, explica que "hace unos años los ayuntamientos sólo cobraban una bonificación" por la concesión de estos terrenos. Sin embargo, posteriormente se aprobó un decreto mediante el cual los consistorios podían decidir qué porcentaje del valor catastral de la autopista querían cobrar al año. Este porcentaje, que supuso un incremento considerable a lo que venían cobrando, se situaba entre el 0,4 y el 1,3%. En este sentido, la gran mayoría de ayuntamientos, como es el caso de Almussafes, Favara o Corbera eligieron el tipo impositivo más alto para ingresar más dinero en las arcas municipales. "El Estado nunca nos ha recurrido esta decisión ni nunca hemos tenido problema con ellos", concluye Pedro Juan Vitoria, alcalde de Favara.

En la Safor, la práctica totalidad de municipios que atraviesa la autopista AP-7 cobran a Albertis, la empresa concesionaria de la autopista de peaje, el correspondiente IBI. Desde que el 1 de enero de 2007 finalizara la bonificación del 90% aprobada por el gobierno de Aznar en 1995, ayuntamientos como el de Oliva, Gandia o Xeraco procedieron a girar el impuesto máximo. Por ejemplo en Oliva Albertis pasó de pagar 15.300 euros anuales a unos 306.000. En Gandia el cambio fue de 7.245 euros a 213.848 euros, 30 veces más.

En la Marina Alta, los ayuntamientos por cuyos términos pasa la AP-7 ya ingresan el IBI a la concesionaria. SUMA, que es la agencia de la Diputación de Alicante en la que estos consistorios tienen delegado el cobro de impuestos, ya ha incorporado al padrón de 2009 a la empresa que explota la autopista.

El Ayuntamiento de Sagunt lleva años cobrando el IBI de la autopista AP-7, atendiendo a los kilómetros que atraviesan el término municipal. El consistorio incluso le gravó más el pago al principio del actual mandato, cuando decidió crear un IBI para los Bienes de Interés o Carácter Especial, que también aplica a instalaciones como el puerto comercial y las dos grandes eléctricas asentadas en la localidad, la central térmica de ciclo combinado de Unión Fenosa y la regasificadora Saggas.