Entre las actividades de su V Mes Cultural de Noviembre, la falla Mendizábal de Burjassot exhibió el pasado fin de semana una muestra sobre "El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha". Un vecino del pueblo, Jesús Moya Casado, expuso en el casal fallero sus cerca de cien volúmenes de ediciones distintas de la novela de Miguel de Cervantes en varios idiomas. En la actualidad hay contabilizadas alrededor de 3.800 en todo el mundo. "Una verdadera pasión por el libro más editado de la historia por detrás de la Biblia", comentó admirado un miembro de la comisión.

La fascinación de Jesús Moya por la célebre obra nació hace diez años el día que su mujer, María Ángeles García, le regaló su primer "Quijote", una edición en doce volúmenes ilustrada por el dibujante, escritor y académico Antonio Mingote. "Desde entonces no he parado de adquirir distintas ediciones y pienso seguir haciéndolo", recuerda este estudioso de la literatura que recorre las librerías de lance y el rastro en busca del preciado tesoro, además de visitar subastas en Internet. "Se equivoca quien crea que invierto un dineral. He conseguido libros a muy buen precio, incluso a dos o tres euros. Solo hay que armarse de paciencia y saber buscar", afirma sobre el coste que supone su afición.

Por otra parte, como seguidor del Siglo de Oro español de las letras españolas, también posee una edición del falso "Quijote" atribuido a Alonso Fernández de Avellaneda. Según Moya, "el gran error del citado autor fue publicar su propio texto como si lo hubiera escrito Cervantes, cuando en realidad Avellaneda era muy buen escritor".

Junto a los ejemplares expuestos en el casal de Mendizábal, no faltaron carteles informativos sobre detalles como el nombre de los ilustradores y el año de edición. "Los libros más antiguos de la exposición datan de principios del siglo XX", indica Moya, a quien la falla le reservó un lugar especial para su reproducción facsímil del primer "Quijote" publicado fuera de la península Ibérica, "concretamente en Bruselas en 1607".

Asimismo, la muestra ofreció la traducción a unos 50 idiomas de la primera página de la novela. A este respecto, Jesús Moya sostiene que "así como hay autores que adquieren prestigio según el número de traducciones de su obra, el idioma al que se traduce El Quijote es el que adquiere prestigio", lo que redunda en "la importancia de una de las mejores novelas de todos los tiempos que continúa publicándose en muchísimas lenguas".

Recientemente en el casal, dentro de los actos culturales de la comisión, Jesús Moya ofreció una charla titulada "Curiosidades y anécdotas de El Quijote" que completó exponiendo su voluminosa y diversa colección de un solo libro: "El libro".

Una edición alemana utiliza la novela para enseñar francés

Con más de cuatrocientos años de historia, la clásica novela de Cervantes sobre el peculiar caballero de la Mancha y su escudero Sancho Panza, una de las obras insignia de la literatura hispánica, ha tenido tiempo de llegar a gran parte del público internacional, ya que ha sido traducida a numerosos idiomas: portugués, inglés, alemán, francés o catalán, entre otros. De hecho se ha llegado a encontrar una edición alemana destinada a la enseñanza del francés, dado que el texto central está en ese idioma y las notas en alemán. Aunque entre los ejemplares más extraños y raros del clásico que han salido a la luz durante los últimos siglos destacan la datada en París alrededor de 1850 en formato cómic, con grandes ilustraciones y texto en viñetas; la edición microscópica ilustrada por Saturnino Calleja (1903); o la edición impresa en láminas de corcho realizada en San Feliú de Guixols (1916). l