Las obras de construcción de la plataforma del tren de alta velocidad sacaron a la luz el pasado milenario que l'Ènova guardaba escondido bajo tierra y dieron paso a una excavación de urgencia en el año 2004. Se trataba de un hallazgo de gran importancia ya que, piedra a piedra, se desenterró una villa rústica de época romana con una zona de vivienda y otra área artesanal y de almacenamiento, dedicada al procesamiento de lino. El importante número de piezas recuperadas ha permitido a los arqueólogos reconstruir la historia de un asentamiento que fue levantado entre los años 65 y 75 d. C. y estuvo ocupado durante casi seis siglos. levante-emv alzira