Las boyas ecológicas de amarre están evitando que en el litoral de Xàbia decenas de embarcaciones arrojen el ancla sobre los fondos marinos. Pero todavía son insuficientes. Lo advierte el Institut de Recerca Oceanogràfica de Xàbia (IROX), que, en un escrito presentado en el ayuntamiento, señala que las embarcaciones siguen tirando el ancla sobre la posidonia en la paradisiaca cala de En Caló (está entre la Granadella y Ambolo), «donde se localizan las praderas más grandes en extensión», y en el Tangó, que se halla en la reserva marina del Cap de Sant Antoni.

IROX asegura que este verano eran decenas las embarcaciones que arrojaban el ancla sobre la posidonia en En Caló. «Y en el Tangó también lo tiran donde no toca», precisa el escrito.

Esta asociación felicita al ayuntamiento por aumentar las boyas de amarre, pero le pide que dé un paso más y adopte nuevas medidas para evitar que la posidonia, un hábitat marino protegida por la legislación europea, se degrade. Propone regular el uso de las boyas durante el verano pidiendo a los usuarios de las embarcaciones reserva previa y cobrarles una cantidad por el mantenimiento de este sistema de amarre ecológico gestionado de forma pública.