Ecologistes en Acció de la Marina Alta no quiere puertas en el litoral. Recuerda que la Ley de Costas deja muy claro que no se pueden hacer obras ni colocar muros que bloqueen el acceso al mar. Pero ha ocurrido. En Xàbia, la familia propietaria de la pinada por la que discurre la senda que baja a la cala del Francés ha colocado una puerta de hierro con tres candados. «Es uno de los tramos más hermosos de nuestra costa y debe mantenerse en buenas condiciones, limpio y con el acceso histórico abierto», sostienen los ecologistas, que subrayan que antes que la familia Lambert comprara los terrenos ya bajaban por la senda los vecinos y pescadores.

Ecologistes en Acció de la Marina Alta pide que «se defienda y reconozca el derecho al paso público y el libre acceso a esta cala del mismo modo que se ha hecho con les pesqueres de cingle». El nuevo PGOU preserva las sendas de los acantilados. Este colectivo califica de «práctica ilegal y propia de otros tiempos» echarle el cerrojo al litoral. Recuerda que los herederos del ministro de Franco Mariano Navarro Rubio aún hacen un uso privado de la costa pública de la Punta de l’Arenal.