Robe Iniesta también es de la cuerda de Guitarras Bros. «Es una guitarra personalizada y superespecial. Lleva grabado, claro, el nombre de Robe», explica Adam Broseta, quien tenía muchísimas ganas de conocer al mítico fundador de Extremoduro.

La guitarra se la llevaron los hermanos Broseta el viernes a Robe a València. Horas después ofrecía un concierto en la Marina. Pero el cantante, compositor, escritor y poeta, un imprescindible en la historia del rock español, quería charlar tranquilamente con estos lutiers que crean guitarras aresanales y de ley y que siguen trabajando en el mismo taller que se asoma al Montgó y que abrieron en 1974 sus abuelos.

Robe sonrió cuando tuvo en sus manos la guitarra. El mástil es de las maderas más antiguas que los hermanos guardan como un tesoro en el taller. También utilizaron la misma madera para el mástil de la guitarra que le llevaron a Mick Jagger (el cantante de los Rolling Stones se encaprichó de una guitarra flamenca cuando la banda actuó a principio de junio en Madrid). El cuerpo de la guitarra es de madera «black limba».

El nombre del compositor, músico y poeta, grabado en la guitarra

El nombre del compositor, músico y poeta, grabado en la guitarra

El instrumento es una joya. El cantante la rasgueó y quedó maravillado. «Es una guitarra especial para componer e inspirarse», apunta Adam Broseta.

«Fuimos a la Terrera, el restaurante de unos amigos, y nos lo cerraron para que le entregáramos la guitarra y comiéramos y pudiéramos hablar. Robe es un apasionado de la artesanía», indica el lutier de Gata, que avanza que el cantante podría visitar pronto el taller de Guitarras Bros.

También aprovecharon para hacer fotografías para un proyecto solidario que llevan entre manos Guitarras Bros, Sergio Dénia (locutor de Radio Dénia Ser) y el propio Robe.

«Luego estuvimos en el concierto. Nos trató de maravilla. Es un privilegio que un artista de la dimensión de Robe tenga una de nuestras guitarras», señala Adam Broseta, que incide en que la guitarra clásica se aviene perfectamente con ese hermoso y arriesgado ejercicio de rock a contracorriente que realiza Robe Iniesta en «Mayéutica», una genial obra musical en la que los violines y la cuerda ayudan al músico a explorar nuevos sonidos y lenguajes.