Alfons Garcia, Valencia

La Real Academia Española (RAE) ha emitido un informe a petición del Tribunal Supremo en el que da su visto bueno a la llamada fórmula Moratinos (la manera cómo el Gobierno se refirió al valenciano en el dictamen para solicitar el uso de las lenguas cooficiales españolas en las instituciones europeas) y subraya además que este es coherente con la doctrina de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL).

La fórmula en cuestión, presentada en Bruselas en 2004, se refiere al idioma propio como «la lengua que se denomina catalán en la comunidad autónoma de Cataluña y en la de las Illes Balears y que se denomina valenciano en la Comunitat Valenciana».

La expresión obtuvo el rechazo tajante del Ejecutivo de Francisco Camps, que en febrero de 2005 la recurrió ante el Supremo. Fue el segundo recurso contra ella, ya que unas semanas antes Coalición Valenciana (CV) había presentado uno.

El proceso ha seguido su curso en silencio y ha alcanzado a diversas instituciones, a las que las distintas partes han pedido opinión sobre el asunto. El alto tribunal se dirigió a la RAE a solicitud, en concreto, del partido de Juan García Sentandreu. La conclusión de la autoridad lingüística española es que la fórmula Moratinos«está próxima a la que aparece en la versión actual del DRAE [el diccionario de la entidad] para la voz valenciano». Esta dice: «Variedad del catalán que se usa en gran parte del antiguo Reino de Valencia y se siente allí comúnmente como lengua propia».Pero no acaba ahí, la RAE, en un informe firmado por su director, Víctor García de la Concha, subraya que la expresión concuerda además con el dictamen de la AVL sobre el nombre y la entidad del idioma autóctono, aprobado en febrero de 2005. Y cita el punto sexto de este documento, que señala que «en España hay dos denominaciones igualmente legales para designar esta lengua: la de valenciano, establecida en el Estatuto de Autonomía de la Comunitat Valenciana, y la de catalán, reconocida en los estatutos de autonomía de Cataluña y las Islas Baleares y avalada por el ordenamiento jurídico español y la jurisprudencia».

La consideración de la RAE deja en evidencia al Consell, que mantiene recurrida judicialmente una formulación avalada -según remarca De la Concha- por una institución consultiva de la Generalitat. Resulta significativa esta situación, ya que el Estatuto de Autonomía, tras la reforma de 2005, contempla que «la normativa lingüística de la AVL será de aplicación obligatoria en todas las administraciones públicas de la Comunitat Valenciana».