La Comunitat Valenciana y Cataluña recibieron un auténtico aluvión de niños que en tierras valencianas alcanzaron la cifra de 30.000 personas. Por provincias Alicante recibió 9.911 niños, 2.727 en Castellón y 13.761 en Valencia. En un primer momento la salida de los niños fue poco organizada. Pero una vez que se asentó la guerra, el gobierno republicano creó la oficina de evacuación que coordinó todos los desplazamientos y los puntos de destino. Los niños madrileños fueron a pueblos catalanes y valencianos. Por su parte los vascos se desplazaron hasta las islas británicas. Eduard Torres, con su productora Cadira de Fusta, recupera una historia poco contada. Personas anónimas a las que les marcó la guerra en plena infancia. Pequeños refugiados que han envejecido con un cambio de destino radical clavado en el corazón. v. x. c.valencia