Tiene 75 años y el corazón delicado, pero está blindado contra los sofocos por una cinematográfica vida contracorriente, un espíritu zen y mucha retranca.

¿Si tropezara con el vicepresidente Cotino, qué le diría?

Me presentaría y le preguntaría si le gustaría verse en una situación así. Creo que los políticos, los que tienen poder, han de demostrar educación, saber comportarse y no avasallar. Al fin y al cabo, en un lado o en otro todos somos personas.

Sabrá que le ha perdido perdón a su hija. ¿Usted perdona a Cotino o no se siente cristiano?

No es cuestión de ser cristiano. He tenido un debate con mi mujer y creemos que estas situaciones no hay que tomárselas a pecho. Nací en el 35 y de mi quinta quedan pocos, así que... Nací en la República, en libertad y me siento libre. Todos estos que nos gobiernan nacieron en el franquismo, menos Fraga.

Se borró del PCE antes de que lo echaran y de EU y milita en Iniciativa. ¿No será por su hija?

Me fui del PCE en Alemania porque a Carrillo se le fue la olla. Entré en Esquerra Unida cuando era un espacio de libertad, con Gerardo Iglesias. Pero todo han sido guerras. Me fui igual que mi hija e igual que los mejores políticos que tuvo EU.

¿Cree que su hija debería ser la candidata de la coalición Compromís a la Generalitat?

Es muy triste que la quitaran de portavoz viendo los resultados de lo que hizo. No veo a nadie mejor, con más atractivo y más garra. Mi hija es una joya poco apreciada.

¿No le gusta Enric Morera?

Tiene la misma cara de buena persona que el Molt Honorable.

¿Se siente orgulloso cuando ve a Mònica con su camiseta de "Wanted Camps" en las Corts?

Muy orgulloso y su madre, más.

Como jubilado, se dedicará usted a ver obras públicas del Consell, de esas con sobrecostes.

No. Mire, ahora me tengo que ir con mi mujer a ver Mamma Mia! Las entradas fueron un regalo de Navidad de mi hija.