El Consell recortó en 2010 en Educación al bajar en 1.468 el número de empleados

La educación fue ya en 2010 la primera pagana de los recortes en los servicios públicos básicos negados por el Gobierno valenciano. El informe de la Sindicatura de Comptes revela que el Consell redujo en 1.552 el número de trabajadores de la Administración pero la comparación con 2009 muestra que la casi totalidad de la rebaja se centró en el departamento de Educación, con 1.468 empleados menos que el año anterior, una reducción rechazada por el Ejecutivo autonómico. Lo denunció ayer el portavoz en materia de Función Pública del PSPV en las Corts Valencianes, Rafael Rubio, quien alertó del deterioro en la calidad de la educación, uno de los pilares para afrontar el futuro.

El Consell, según refleja el Síndic, declaró en 2010 130.342 trabajadores, frente a los 131.894 de 2009. En 2008, la cifra fue de 129.272. Del total registrado el año pasado, 62.032 pertenecían a Educación, repartidos entre funcionarios (de carrera o interinos), laborales (fijos o temporales) y eventuales. Entre los funcionarios de carrera hubo un descenso de 1.176 trabajadores, 260 entre los interinos y 34 entre los laborales fijos. Los laborales fijos y temporales aumentaron uno cada uno. En total, el citado descenso de 1.468 empleados. Los otros 84 se repartieron en el resto de departamentos: Bienestar Social perdió 173; Agricultura, 36; Economía, Hacienda y Empleo, 29; Justicia y Administraciones Públicas, 25; Medio Ambiente, 22; Presidencia, 9; Infraestructuras, 6; Industria, 5; y Cultura, 2. Sanidad aumentó 170; Solidaridad, 52; y Gobernación, uno; mientras Turismo se quedó igual. En el conjunto de empleados de la Generalitat, hubo 1.175 trabajadores menos entre los funcionarios de carrera y 254, entre los interinos; 110 empleados menos entre los laborales fijos pero 65 más entre los temporales; y 24 eventuales más. Entre el personal estatutario, todo de Sanidad, se contabilizan 621 temporales menos, aunque hay 519 fijos más. El personal sanitario estrictamente disminuyó, de 53.422 a 53.338, 84 menos.

Otros datos arrojan luz sobre la calidad de los servicios, lamenta Rubio. El personal sin plaza fija (interinos y temporales) fue de 40.027 personas, el 30,7% de todos los empleados, frente a los 90.315 fijos. En Educación, esa tasa de temporalidad estuvo cerca del 20% —el 19,7%, 12.236 trabajadores— pero en Sanidad se disparó hasta el 44,3%, 24.178 de los 54.537 empleados.

«Las cifras no cuadran»

La cifra de trabajadores (130.342) supera en 9.525 el número de puestos de plantilla de la Generalitat (120.817) debido a la gente que ocupa plazas que no figuran en la relación de puestos de trabajo y también porque cada interino contratado computa como un trabajador aunque a lo largo del año haya varios que ocupen el mismo sitio. Rubio denunció que las cifras de gasto en personal no cuadran. El Consell alardeó de una rebaja de sueldos de una media del 5%; sin embargo, el gasto en 2010 fue de 5.297 millones, frente a los 5.345 de 2010, tan sólo 47,5 millones, un 0,9% menos. «¿Cómo administran las cuentas?», se preguntó Rubio