Por 300 votos a favor y diez en contra, la asamblea de farmacéuticos que se celebró anoche en la sede oficial del colegio de Valencia aprobó el cierre indefinido de los establecimientos a partir del lunes si la Conselleria de Sanidad no paga la factura de dos de los cuatro meses que adeuda al sector (desde el mes de febrero), lo que supone un desembolso de 240 millones de euros, a un promedio de 120 millones de factura farmacéutica por mes.

En total, los 2.285 establecimientos farmacéuticos han dispensado 22 millones de recetas en los últimos cuatro meses, que son las que adeuda el Consell

Los farmacéuticos de Castelló también han acordado cerrar las oficinas a partir del lunes, como sus homólogos de Valencia, mientras que los de Alicante han propuesto cobrar la totalidad de los medicamentos a los usuarios.

La asamblea fue muy controvertida ya que la mayoría de los asistentes rechazó la huelga de cinco días que proponía la Junta directiva del colegio. Finalmente se votó el cierre indefinido.