El presidente del PP en Alicante, José Císcar, anunció ayer que renuncia a presentar su candidatura a la presidencia de la diputación provincial porque el partido «está por encima de las personas». Císcar dio a conocer esta decisión, a la que se había resistido con uñas y dientes, en una rueda de prensa al día siguiente de asistir a la Convención del PP en Madrid, donde responsables de Génova (particularmente, Javier Arenas) lo convencieron para que desistiera ante el veto de Ciudadanos a respaldarlo. El propio Císcar indicó que el domingo compartió su decisión de dar un paso atrás con la dirección nacional y «fruto de esas conversaciones» se decidió que el candidato sea el alcalde de Calp y diputado autonómico, César Sánchez.

La renuncia a la diputación comporta que el barón provincial y exvicepresidente del Consell peleará ahora por el liderazgo del grupo popular de las Corts, donde hasta ahora, a la espera de que el exjefe del Consell y presidente regional, Alberto Fabra, se vaya al Senado, había dos aspirantes a la portavocía: la coordinadora general, Isabel Bonig, que contaba para ello con el apoyo de Císcar, y la exportavoz del Consell, María José Català, avalada por Fabra. Ahora irrumpe Císcar y el tablero del grupo popular amenaza con saltar por los aires.

Fabra, de presidente hasta 2016

El propio Císcar, quien no tomará posesión del acta de diputado provincial, subrayó que ahora se centrará en su escaño en las Corts, «donde hay una importantísima labor de oposición». También dijo que su «máxima motivación en estos momentos» es el PP, circunstancia en la que enmarcó su renuncia a encabezar la candidatura a la Diputación de Alicante. Ciudadanos amenazaba con apoyar a un candidato del PSPV si el PP mantenía a Císcar, al entender que éste no representa la «regeneración». Entre los populares se sostiene que el objetivo de Císcar es la presidencia regional del PPCV; la cuestión es si el líder alicantino considera la portavocía de las Corts un paso previo. De momento, de las conversaciones del fin de semana no ha trascendido que Génova esté interesada en montar una gestora en la C. Valenciana. Esto significa que Fabra se irá al Senado y dejará en septiembre el acta de las Corts mientras mantendrá la presidencia del PPCV hasta el congreso de enero de 2016.

La decisión, de la regional

Para enrarecer más el ambiente, mientras desde Alicante se decide el candidato a la diputación „que se vota este viernes„ se obvia que el nombre lo debe dar el comité de listas regional, que preside Catalá. Ésta podría incluso tomar una decisión sin precisar de propuesta previa de Alicante. La regional no saltará el guión pero muchos creen que no se han guardado las formas.