Un verano de récord

Más turistas, más gasto, más pernoctaciones y más viajes en un verano que determinará si realmente los datos macroeconómicos que apuntan a que algo está cambiando en España son ciertos o son simple humo ante un final de año marcado por las elecciones generales.

En la Comunitat Valenciana, tanto el sector del turismo, como otros que ven ligada su bonanza económica a la llegada de visitantes y viajeros a la «terreta», han registrado ligeros aumentos de ventas y, por tanto, de ingresos. Incrementos que dejan un verano de récord, con los mejores resultados de rentabilidad de los últimos seis o siete años, según los datos de la patronal hostelera, debidos en parte a la progresiva recuperación del turismo nacional y a factores externos como la inestabilidad política de países del Mediterráneo oriental como Grecia, Túnez, Egipto y Turquía. Variables a las que hay que añadir la bajada del precio del petróleo, que ha abaratado los costes del transporte, y la debilidad del euro que favorece, fundamentalmente, al turismo británico y estadounidense.

Entre enero y julio, el número de turistas extranjeros en la Comunitat Valenciana superó los 3,6 millones, lo que supone un 4 % más que en el primer semestre de 2014. En concreto, llegaron más visitantes procedentes de Francia, Países Bajos y Bélgica. En total, se gastaron 3.100 millones de euros, un 8,2 % más respecto al mismo periodo del año anterior. El gasto medio también aumentó un 4,1 % por persona hasta los 855 euros.

En cuanto al alojamiento hotelero, hasta julio de 2015, el número de visitantes en los hoteles valencianos creció un 6,8 % frente a 2014, superando los 4,4 millones y generando un total de 14,8 millones de pernoctaciones, un 5,8 % más. En los apartamentos turísticos, cámpines y alojamientos rurales, el incremento fue del 12,3 %, superando los 848.000 turistas, con unas pernoctaciones cercanas a los 6,2 millones (un 8,5 % más) hasta junio.

Para este mes de agosto, que está a punto de finalizar, también se esperan datos mejores que los últimos años, con una ocupación en el litoral valenciano que rondará el 81,5 % en los hoteles, un 3,86 % más que agosto de 2014, y el 87,37 %, en los apartamentos.

Según datos de la Agència Valenciana de Turisme, las previsiones para el conjunto del verano apuntan a que visitarán la C. Valenciana 80.000 turistas extranjeros más que en 2014, lo que supondría un incremento del 2,5 %, hasta llegar a los 3,1 millones de visitantes de otros países, y un gasto superior a los 2.800 millones de euros, un aumento del 3 % sobre el dato del año pasado. Además, también se calcula que los españoles realicen 7,6 millones de viajes a localidades valencianas, generando cerca de 60 millones de pernoctaciones.

Asimismo, se espera que los hoteles reciban cerca de 3,2 millones de turistas (crecimiento cercano al 3,6 %), lo que se traduce en 12,3 millones de pernoctaciones (un 3,5 por ciento más); y que la oferta extrahotelera (apartamentos, cámpins y alojamientos rurales) atraiga 60.000 turistas más que en el verano de 2014, hasta superar los 1,1 millones (un 6 % más), generando 8,2 millones de pernoctaciones, un 4,8 por ciento más.

Cifras que erigen a la valenciana, detrás de Andalucía, como la segunda autonomía con más pernoctaciones de residentes españoles, con un aumento del 4,2 % respecto a los datos del mismo periodo del año pasado, lo que es una subida superior a la media española, que se quedó en un 2,5 %, según el INE. La C. Valenciana también fue durante los primeros meses del verano, la tercera autonomía con más ocupación de plazas hoteleras, con un 73,2 % por detrás de las Illes Baleares y las Islas Canarias.

Para Francesc Colomer, secretario autonómico de Turisme, los datos de este verano son «ciertamente positivos» y confirman «el gran potencial del sector turístico como parte de la respuesta a la necesidad de generar riqueza y empleo». No obstante, admite que como destino turístico aún quedan «muchos retos», como la desestacionalización, profesionalizar e incrementar la oferta, mejorar los productos, y aumentar la competitividad y la capacidad de seducción, ya que el futuro turístico dependerá de todo ello.

Los datos de la patronal Exceltur también reflejan una situación positiva. Según encuestas realizadas a empresarios del sector, el Índice de Confianza Turístico Empresarial en alojamiento (Ictur) en la C. Valenciana es del 58,4 %, más del doble que hace tres años, y la media española es del 39,7 %. Además, en torno al 70 % de los empresarios valencianos opinan que durante el segundo semestre de 2015 aumentarán los beneficios y las reservas.

Antonio Mayor, presidente de Hosbec (asociación de Hosteleros de Benidorm, Costa Blanca y Comunidad Valenciana), se muestra optimista a pocos días de finalizar la temporada y no duda en afirmar que este es el mejor momento en rentabilidad de los últimos seis o siete años. Calcula, a falta de los últimos datos, que en la segunda quincena de agosto se superará el 93,5 % de ocupación que el mismo mes del año pasado. Un panorama positivo que para Hosbec revela que la hostelería continúa recuperando la rentabilidad perdida durante la crisis, de la que el sector, según Mayor, «ha sabido mantener el tipo».

El tráfico aéreo crece un 10,5 % y el ferroviario, un 6 %

De la mejoría del turismo también se beneficia el sector del transporte. Según Renfe, la venta anticipada de billetes de trenes de larga distancia y alta velocidad con destino y origen Valencia ha aumentado entre un 5 y un 6 % este mes de agosto, destacando conexiones con ciudades como Málaga, Barcelona, Murcia, Gijón, Alicante, Sevilla o Madrid. Además, desde el 15 de junio, más de 200 trenes han doblado su capacidad, y ha aumentado el número de viajeros con la celebración de grandes eventos, como los festivales de música FIB y Rototom, en Benicàssim. El tráfico de pasajeros en los aeropuertos valencianos también se incrementó en julio. Por el de Alicante-Elche pasaron 1.250.395 viajeros, un 3,8 % más que en 2014, y por el de Valencia, 548.200 personas, un 10,5 % más. El estreno reciente de dos rutas aéreas y la ampliación de conexiones con Holanda (Eindhoven y Amsterdam) y Alemania (Stuttgart y Frankfurt) ha provocado la llegada a Valencia de un 22 % más de holandeses y un 12 % más de alemanes en el primer semestre.