Puig aplaude que Sánchez reconozca en su discurso el déficit de financiación

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, acompañó ayer al líder del PSOE, Pedro Sánchez, en la primera jornada de un debate de investidura que, salvo sorpresa mayúscula, se saldará en blanco. Puig, que por la mañana asistió a la inauguración de las nuevas dependencias municipales en Xàbia, viajó a toda prisa a Madrid para no faltar a la cita con quien se postula para presidente del Gobierno merced a un pacto con Ciudadanos y busca seducir a última hora a Podemos para que al menos se abstenga, una opción harto improbable.

El jefe del Consell valoró muy positivamente el discurso del secretario general del PSOE. «Es muy positivo para los valencianos que en su discurso haya señalado que el problema de la financiación no afecta solamente a Cataluña, sino que es un problema general, un asunto que atañe también y mucho a los valencianos, que padecemos un déficit crónico de financiación», destacó Puig en declaraciones a Levante-EMV.

Para el jefe del Consell, el candidato a presidente tiene asumida la «singularidad de los territorios y la igualdad entre las personas», un precepto que reivindica la Generalitat, dijo. «Las propuestas de Pedro Sánchez son un paso adelante. Ayudarán a mejorar la vida de los valencianos», fue el veredicto de Puig al término del discurso de investidura de Sánchez. El jefe del Consell siguió la sesión desde la tribuna de autoridades con los presidentes socialistas de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. También se dejaron ver los exministros Carmen Alborch, o el también valenciano Jordi Sevilla, que llevó la cartera de Administraciones Públicas con Rodríguez Zapatero y se perfila como ministro del ramo en el caso de que el PSOE vuelva a la Moncloa.

«Sin propuestas»

La presidenta del Partido Popular valenciano, Isabel Bonig, consideró que el de Sánchez Castejón había sido un «discurso vacío». «Sin propuestas y más preocupado en criticar y desacreditar a Mariano Rajoy que en ofrecer un proyecto de país», explicó la líder de los populares valencianos. Para Bonig, «España necesita estabilidad y un gobierno que siga apostando por el crecimiento desde propuestas coherentes y factibles». «Lo que hoy hemos oído del líder socialista ha provocado incluso la sorna de los partidos a los que él busca como socios», concluyó.

El portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, afeó a Sánchez que hablara de diálogo y tenga ya cerrado un acuerdo con Ciudadanos que pretende, dijo, «imponer» al resto de posibles socios. Baldoví tachó de «previsible» y «decepcionante» la intervención de Sánchez y criticó que no incidiera en los asuntos en los que hay desacuerdo con otras fuerzas si lo que quería era sumar el apoyo de las que, como Compromís, tienen previsto rechazar su investidura.