El temporal de nieve más intenso de los últimos 12 años dejó ayer prácticamente aislados a miles de vecinos de la Vall d´Albaida y la Costera. Las principales vías de acceso de localidades como Bocairent, la Font de la Figuera o Fontanars quedaron impracticables y cerradas al tráfico durante la mayor parte del día y decenas de vehículos permanecieron atrapados durante horas por la acumulación de nieve en las principales carreteras de estas comarcas, que registraron numerosos incidentes.

La nieve siguió descargando hasta bien entrada la tarde de ayer en el núcleo urbano de Bocairent, donde alcanzó los 40 centímetros de altura pese a las lluvias y a la frenética actividad de las cinco máquinas quitanieves habilitadas por el ayuntamiento para despejar las calles. La ola de frío interrumpió la actividad de colegios, empresas y servicios públicos. La línea férrea de la Vall dejó de funcionar a mediodía y los problemas con las telecomunciaciones se prolongaron durante toda la jornada.

El barrio medieval de Bocairent se convirtió en una pista improvisada de esquí. Las autoridades se esforzaron en devolver las calles a la normalidad en vano: las labores de limpieza tuvieron que suspenderse por la noche y las clases continuarán hoy suspendidas.

Por otro lado, el autocar fletado por el Ayuntamiento de Xàtiva que retornaba ayer a una expedición local desde la feria internacional de turismo de Madrid, Fitur, tuvo que detener anoche su ruta en Honrubia (Cuenca). Las veinte personas que viajaban en el vehículo (periodistas, hosteleros, personal del consistorio y directivos de la Junta Local Fallera con las falleras mayores) tuvieron que pasar la noche en un hotel de carretera, El Marino. Las intensas nevadas que arreciaron desde la tarde en las provincias de Cuenca, Albacete y Valencia desaconsejaban que la marcha continuara. El ayuntamiento ha asumido los costes de esta eventualidad.

Atrapados en una cabaña

Las comarcas de la Hoya de Buñol y Requena-Utiel fueron de las más afectadas por la nieve. En Siete Aguas un autobús escolar quedó atrapado por los montículos blancos en la carretera a la altura de una curva cerca del ecoparque de la localidad. Los alumnos pudieron ser finalmente trasladados hasta Requena sin que ninguno de ellos resultara herido. Asimismo, dos hombres tuvieron que ser rescatados por los bomberos y la Guardia Civil después de que se quedaran incomunicados en el monte, en el paraje de Raidón.

Uno de ellos es Rafael Zahonero, antiguo alcalde de Siete Aguas, quien se refugió en una cabaña y pidió ayuda. «Un brigada que ha ido a buscarlo también se ha quedado atrapado y se les ha descargado la batería del móvil, pero los tenemos localizados», explicaba Santiago Mas, actual primer edil poco antes de que los servicios de rescate llegaran hasta su ubicación.

Otro lugar castigado por el temporal es Chera donde al cierre de esta edición seguía nevando con intensidad y sus vecinos estaban totalmente incomunicados por carretera. «De momento aguantamos pero dormiremos con un ojo abierto y mañana se hará un bando para que la gente mayor no salga de casa si no es estrictamente necesario, los que requieran servicios municipales se los llevaremos a casa», explicaba el alcalde Alejandro Portero.

Cuatro alumnos de un instituto de Utiel vivieron una auténtica odisea para llegar a casa debido a que la carretera CV-395 estaba impracticable. Un todoterreno los tuvo que rescatar y a las ocho de la tarde llegaron a Chera, cuando estaba previsto que su llegada fuera a las 16.00 horas. «Por fin están ya con sus padres», apuntaba el alcalde del municipio.

El temporal también dejó sin luz varios municipios de la comarca del Valle de Ayora tras la caída de un rayo en un poste eléctrico.

La Marina

En la Marina Alta, la intensa lluvia de ayer derritió la nevada del día anterior. Incluso granizó en Calp, Xàbia, Benissa o Dénia. En Calp, las calles quedaron cubiertas de una capa de granizo. Los ríos Gorgos y Girona volvieron a bajar con caudal tras recogerse en el interior de la comarca más de 130 litros por metro cuadrado.

Mientras, un temporal con olas de cuatro metros se tragó las playas de Dénia. En les Deveses, las olas chocaban directamente contra los muros de las casas. El puerto dianense estuvo ayer cerrado. La naviera Baleària canceló los buques que debían zarpar de la ciudad. La flota pesquera tampoco salió a faenar.