Los taxistas consideran que el control de la calidad del servicio mejorará cuando la nueva Ley del taxi se ponga en marcha. El pleno del Consell aprobó el viernes el proyecto definitivo de la norma, que ya se ha remitido a las Corts para su tramitación. «En general, nos parece bien», afirma Fernando del Molino, presidente de la Confederación de Autónomos del Taxi de la Comunitat Valenciana, aunque desde el sector aún no han podido leer la redacción definitiva de la ley.
Entre las nuevas medidas que destacan, «se va a consultar al sector para dar nuevas licencias» y «se delimitará de forma clara el modelo del taxi, con un titular por licencia», esto último una reivindicación histórica de los taxistas, recuerda Del Molino.
Además, el proyecto de ley también incluye la creación de Centros de Distribución de los Servicios del Taxi. «Antes solicitamos algunos cambios, como que la sede fiscal obligatoria sea en la Comunitat Valenciana y que se trabaje más a fondo, así que es bueno que se regule», asegura el presidente de la confederación.
Otra de las novedades es que se permitirá la autorización del servicio con vehículos de hasta 9 plazas en municipios y áreas de prestación conjunta de zonas rurales. A los taxistas les hubiera gustado que este permiso se ampliara a todas las áreas y no limitarla solo al ámbito rural, lo que permitiría «dar un servicio más amplio», lamentan.
Presencia de mujeres
Asimismo, creen que la recuperación de competencias por parte de municipios de menos de 20.000 habitantes puede ser «peligrosa» y estarán pendientes de la manera en la que algunos ayuntamientos den las nuevas licencias. A pesar de esto, creen que la regulación actual era «injusta» en estos casos.
Sobre que las mujeres tengan preferencia a la hora de obtener una licencia en caso de empate, Fernando del Molino asegura que les parece «bien que haya más mujeres», pero puntualiza que «cada día hay más mujeres en el sector que llegan por sí solas», por lo que consideran que la medida quizás no era del todo necesaria. València cuenta con 300 mujeres al volante de un taxi de las más de 3.000 licencias con las que cuenta el sector.
