Los amigos y familiares de Jessyca Bravo, la joven asesinada por su expareja en Elda, se acercaron ayer hasta el tanatorio de Novelda, donde fue trasladado el cuerpo sin vida de la víctima tras realizarle la autopsia en el Instituto de Medicina Legal de Alicante. Los gestos de dolor, abrazos y lágrimas se sucedieron durante toda la jornada recordando la gran pérdida de la muchacha, querida por todos. Su localidad natal, Monforte del Cid, decretó tres días de luto oficial.