Glòria Marcos abandona Esquerra Unida, formación en la que ha militado desde su puesta en marcha, hace 32 años. Esta mañana ha solicitado formalmente la baja. La actual dirección le había prohibido usar la sede de la calle Borrull, un veto que ha levantado poco antes de atender a los medios. Con la voz entrecortada, Marcos dice que ya no se siente representada por la dirección de Esquerra Unida que lidera Rosa Pérez ni por la federal que comanda Alberto Garzón. Ningún dirigente la ha llamado. Solo afiliados.

Marcos entiende que hay un proceso de disolución de Izquierda Unida en Podemos en el que no se ha garantizado el debate en profundidad, que ha sido refrendado por el 16% de los afiliados y en el que se ha prohibido la discrepancia, "una mordaza interna en nombre de la democracia", denuncia Marcos.

Además, en el nuevo proyecto de IU impera la centralización y el cesarismo, tics propios de la derecha y ahora asumidos por la coalición de izquierdas, según Marcos. Una forma de funcionamiento que consagra las decisiones "desde arriba", a golpe de consulta diseñada por la dirección, que da pie a todo tipo de trucos. Según la excoordinadora general, el concepto de militancia ha desaparecido, igual que la vida orgánica en Esquerra Unida. En definitiva, un estado que anuncia la disolución, avisa.

También detecta que en EU se ha iniciado un proceso de extermino de la discrepancia. Y Marcos ataca a la actual coordinarora general, Rosa Pérez, por usar la dimisión del presidente de la Diputación, Jorge Rodríguez, para sustituir a una trabajadora que está de baja por enfermedad, una decisión que considera inaceptable y que motivaría, dice, la reacción de la izquierda y los sindicatos en caso de tomarla un empresario.

Precisamente, Marcos ha explicado que el detonante ha sido la no renovación de la asesora en la diputación de baja por enfermedad, algo "totalmente inadmisible" en una formación de izquierdas y que le hace "insoportable" poder seguir. "La dirección de IU ni de EU ya no me representa en absoluto", ha constatado.

La histórica dirigente de EU ha explicado visiblemente emocionada, entre lágrimas, los motivos que le han llevado a presentar la baja. "Se trata de una decisión "triste y dolorosa" pero "muy madurada" y que ha esperado por "coherencia" a hacerla efectiva a la renovación del Consell Valencià de Cultura (CVC), institución de la que formaba parte a propuesta de EU, porque abandonar la formación antes de que se nombraran a los nuevos consejeros le parecía "transfuguismo político".

Marcos ha lamentado que pese a que este martes anunció su dimisión nadie de la dirección la ha llamado para preguntar qué sucedía en un "desprecio total", aunque sí recibió el apoyo de militantes de toda la Comunitat. No obstante, ha señalado que no ha pedido a nadie que siga sus pasos porque "la gente que está en la dirección debe permanecer para luchar desde dentro".

A partir de ahora ha anunciado que como "mujer política" que es seguirá trabajando por causas solidarias como Acció Cultural, el Micalet, o el movimiento feminista.

Marcos ha señalado que la dirección de IU de Alberto Garzón ha impulsado un nuevo modelo "sin respetar los estatutos vigentes y sin un debate" que solo ha contado con el apoyo del 16% de los afiliados.

Sin embargo, la dirección afirmó que fue aprobado por el 81% de los afiliados cuando en la consulta solo participó el 19% de la militancia. Además, ha arremetido contra la dirección por "prohibir expresamente" a los críticos hacer ruedas de prensa ni comentarios en las redes sobre los resultados.

De este modo, sustituyen las propuesta políticas por "unas redes de activistas" que funcionarán a "golpe de titular, de Facebook y Twitter" para "organizar el conflicto". "De este modo, sin reflexión ni debate, solo triunfa la extrema derecha y el fascismo", ha advertido.

Además, ha mostrado su absoluta oposición a este nuevo modelo "piramidal" en el que desde la dirección federal se toman decisiones "tan importantes" como el diseño de las confluencias o las iniciativas municipales sin respetar los particularidades de los territorios.

Así se dan situación "absurdas" como a nivel Federal se apueste por una confluencia con Equo y Podemos cuando en la Comunitat es "imposible" porque los verdes están dentro de Compromís. En esta línea, ha cuestionado la efectividad del Banco de iniciativas municipales de IU. "Los problemas de Castilla León serán muy importantes pero no sé cómo pueden resolver los causados por el granizo en La Ribera", ha apuntado.

"Se está haciendo desaparecer la soberanía de los territorios de una IU federal en la que desde arriba se toman las decisiones", ha evidenciado Marcos, que por ello ha cuestionado que es "difícil" creer que el partido "defienda un modelo federal del Estado cuando no lo aplica en su estructura interna".

Marcos ha aclarado que es "firme defensora" de la confluencia pero no de la "integración" y ha cuestionado que así se pueda mantener un proyecto propio porque "las dinámicas cesaristas te arrastran". "La gente de los pueblos está haciendo un trabajo fantástico pero en otros sitios hay una política más de imagen que de hechos", ha criticado.

DESPIDO "INADMISIBLE"

Marcos ha señalado que la situación en la Comunitat es "todavía peor" no solo porque "copian los comportamientos y las propuestas" del equipo de Garzón sino porque es "inadmisible e intolerable" que la coordinadora de EUPV, Rosa Pérez, "haya dejado en la calle a una trabajadora que está de baja por enfermedad".

Así, ha señalado esta no renovación se ha realizado con "la excusa" de que el nuevo presidente de la Diputación de Valencia tiene que volver a nombrar a los asesores tras la dimisión de Jorge Rodríguez. De este modo, se ha "incumplido" el acuerdo del Consell Polític Nacional que marcaba que "no se puede dejar a un trabajador en la calle hasta que no esté dado alta otra vez tras su enfermedad".

Marcos ha señalado Pérez se ha excusado en las opiniones del secretario y del interventor pero que no le han dado "nada por escrito" pese a haberlo solicitado. "Entiendo que uno escoge a su equipo de confianza pero una organización de izquierdas no puede nunca dejar nunca a un trabajador desprotegido", ha advertido.

De hecho, ha señalado que si un empresario hubiera actuado así "toda la izquierda se le tiraría encima y no puede ser que sí ocurra en EUPV". Por ello, lamentado que los sindicalistas de CCOO que apoyaron a Pérez "miren hacia otro lado" ante este "recorte brutal" de los derechos.

"Yo he luchado toda la vida por los trabajadores y un País Valencià al que quiero su lengua y cultura por encima de todo y no me puedo mantener en un proyecto de EU que lo han cambiado y que ya no es al que me afilié hace 32 años", ha apostillado.