Más de 4.700 personas han firmado ya una petición a través de Change.org para exigir a la Conselleria de Sanidad que se impugne la oposición para auxiliar de Enfermeríacelebrada el pasado domingo y a la que se presentaron 21.000 personas en las tres provincias para 626 plazas.La petición fue abierta el martes y en 24 horas se consiguieron 4.000 firmas.

La impulsora de esta iniciativa alega en primer lugar la masificación de las aulas en las que se desarrolló la prueba, en especial en el examen realizado en Alicante.

«Los opositores chocábamos codo con codo, lo que permitía de forma totalmente cómoda mirar los exámenes contiguos, copiar y hablar». También que se permitiera el uso de teléfonos móviles en el aula con conexión a Internet, relojes inteligentes y diversas formas de buscar las respuestas del examen.

Otro de los argumentos para solicitar la impugnación de la oposición es que se permitieron durante el desarrollo del examen salidas al baño sin supervisión, «lo que permitió a las personas que lo hicieron, una manera más de buscar respuestas al examen».

Por último, se hace referencia a la calidad de las preguntas de la oposición. «Muchas son de respuesta ambigua, preguntas que no tienen especificación concreta, respuestas en la corrección que no es la correcta, pregunta de otros temarios que no estaban dentro de los específicamente señalados en la instancia correspondiente, temarios que no son de la categoría de auxiliares de enfermería y un sin fin más de objeciones a preguntas mal formuladas».

Pese a las irregularidades denunciadas (el sindicato USO ha pedido oficialmente la repetición del examen), la Conselleria de Sanidad niega que haya habido irregularidades. A preguntas de este diario, la conselleria sostiene que una vez leídas las instrucciones al inicio de la oposición, «los teléfonos quedaron debidamente silenciados».