El Consell da marcha atrás y no permitirá el uso de perros potencialmente peligrosos en la práctica de la caza. Medio Ambiente ha retirado la modificación a la Ley de Caza de la Comunitat Valenciana de 2004, en la que introducía la excepción de aceptar un can de raza peligrosa en grupos de diez. Una prohibición expresa en la anterior normativa que seguirá manteniéndose. Se atiende así en parte las observaciones del Consell Jurídic Consultiu, que reprochaba al departamento de Elena Cebrián que intentara «suavizar» el veto existente. Fuentes de la conselleria, además, admitían la conveniencia de abrir «un debate-diálogo» que recoja diferentes y especiales sensibilidades, tanto en lo que respecta al tratamiento de los perros, como en el apartado de la sobreexplotación de jabalíes.

Aunque se trata de un anteproyecto de ley, que ahora deberá pasar el trámite en las Corts, se admite que antes de adoptar una medida de esas características, cabe pulsar la opinión de asociaciones o entidades con voz en la materia. Una advertencia que ya lanzaba el Jurí dic en sus alegaciones, quien hacia hincapié en que ni la Dirección General de Medio Natural y de Evaluación Ambiental, ni la Subdirección General de Medio Natural habían realizado «ninguna valoración sobre cómo pueda influir su conducta en el comportamiento de los otros miembros de la misma especie pero de otra tipología racial, ni en los posibles solapamientos de supuestos distintos de aseguramiento obligatorio»

La Abogacía de la Generalitat ya había expresado previamente su contrariedad, en un informe emitido el pasado mes de agosto. En la Comunitat Valenciana hay censados 43.361 perros considerados potencialmente peligrosos, que están inscritos en el Registro Informático Valenciano de Identificación Animal. Son en total quince las razas más peligrosas, entre las que destacan el American Staffordshire, el Rottweiler, el American Pitbull Terrier o el Doberman.