La tercera edición del Congreso Forestal de la Comunitat Valenciana, celebrado estos días en Calp, ha abordado la gestión de los incendios forestales en el contexto del cambio climático. Y una de las conclusiones a la que se ha llegado es que la prevención y la extinción de incendios forestales «son dos disciplinas, indisolubles, que en ocasiones han estado reñidas». Las Brigadas Forestales, pueden contribuir como servicio público, a superar esa problemática y mejorar la protección y conservación del medio natural, porque de las exposiciones de los distintos expertos queda claro que los operativos de extinción «no serán capaces de controlar los incendios forestales sin tener preparado el territorio para el paso del fuego».

«La vulnerabilidad del territorio ha crecido debido al contacto de las masas forestales con las zonas habitadas, urbanizaciones y pueblos», es otra de las aportaciones. El estado actual del monte, tratamientos post-incendio, así como la gestión de los escosistemas forestales buscando una mayor resistencia al fuego y una mayor resiliencia tras la perturbación, también se abordaron en otras conferencias. Uno de los bloques del congreso ha sido el de la creciente importancia de las nuevas tecnologías, «tanto para conocer las causas, consecuencias, origen y evolución de los incendios forestales como para ayudar a su extinción».

«Hemos visto soluciones tecnológicas sobre el cálculo de la biomasa en las masas forestales o como delimitar las zonas afectadas por distintas causas de mortalidad con poco margen de error y reducido coste en tiempo y recursos», según Fernando Pradells, ingeniero forestal y presidente de la Plataforma Forestal Valenciana (PFV).