La mujer de 39 años hallada sin vida y semidesnuda a primera hora del domingo en un portal de Torrevieja falleció a causa de los golpes sufridos en la cabeza al caerse por las escaleras en un estado de embriaguez. La autopsia practicada durante la mañana de ayer en el Instituto de Medicina Legal de Alicante apunta a que la muerte es compatible con la caída y con los traumatismos craneoencefálicos internos que sufrió en ese momento. También apunta que «no se aprecian otros signos de violencia de terceras personas ni signos de defensa».

De esta manera, se descarta que la muerte haya sido un episodio de violencia machista, como en un principio se barajó, ya que en el edificio del accidente reside la expareja de la víctima, o que la mujer fuera objeto de una agresión sexual. El resultado de la autopsia confirma el sentido de la investigación en base a los testimonios recabados y a unas imágenes grabadas, en las que se ha observado que la mujer se desvistió por sí misma de cintura para abajo antes de precipitarse, por accidente, por las escaleras.

Los agentes de la policía judicial han realizado un exhaustivo visionado a las imágenes obtenidas de las cámaras de videovigilancia del edificio, donde se observa que la mujer deambula por el bloque de viviendas en un aparente estado de embriaguez durante la madrugada del 6 al 7 de abril. Las cámaras captaron que en la planta menos uno, correspondiente con el garaje, se quitó los pantalones que portaba y la ropa interior para miccionar, y que posteriormente subió a plantas superiores olvidando vestirse.