La guardería rural del Consorcio del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Mijares ha capturado dos galápagos leprosos (Mauremys leprosa), una especie endémica de la Península ibérica y el norte de África, que se encuentra en peligro de extinción.

Uno de los dos ejemplares, un macho, no había sido localizado antes, algo que desde el Consorci del Riu Millars señalan como una «noticia muy importante» para la conservación de esta especie en un tramo de río en el que hay presencia de tortugas exóticas invasoras.

El organismo público desarrolla un estudio desde esta primavera para preservar una especie que solo se encuentra en la Península Ibérica y el norte de África.

Los dos galápagos se han conseguido capturar en las lagunas artificiales ubicadas aguas abajo de la depuradora de Almassora. Este tipo de tortuga tolera aguas salobres e igualmente están adaptadas a sobrevivir en los ríos de la Comunitat Valenciana.

El estudio para controlar el estado de conservación de las especies autóctonas como son el galápago europeo (Emys orbicularis) y el galápago leproso (Mauremys leprosa) se realiza en lugares concretos del tramo bajo de la desembocadura, específicamente en las lagunas artificiales y en las Golas del Mijares, entre las poblaciones de Borriana y Almassora.

La campaña también tiene como objetivo prioritario hacer un seguimiento exhaustivo de las tortugas exóticas invasoras como es la de Florida (Trachemys scripta) y erradicarlas del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Mijares. La guardería rural responsable de hacer el seguimiento de campo cuenta con varias trampas para capturar los ejemplares, que pueden ser de dos tipos. Las nasas, por un lado, se sumergen en el agua e incorporan cebos ideados para que entren los reptiles y se quedan atrapados. Por otro lado, se colocan trampas flotantes destinadas a que los reptiles que accedan a su plataforma móvil se queden atrapados en el interior.