El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, ha recomendado revisar de forma «urgente» la aplicación informática de cita para trámites de extranjería y analizar si es necesario incrementar las plantillas de las oficinas donde se realizan dichos trámites, ante el «número importante de quejas» en València y otras provincias como Madrid, Barcelona, Girona, Murcia, Sevilla, Alicante o Palma de Mallorca. «Se han recibido en esta institución un número importante de quejas relativas al deficiente funcionamiento del sistema de cita previa de extranjería. En los últimos meses se ha incrementado el número de provincias en las que se detectan estas dificultades de acceso», subraya en una recomendación.
Según precisa la institución, en un primer momento dichas quejas venían referidas a zonas puntuales del territorio nacional, como Barcelona o Madrid. Precisamente, el pasado viernes 4 de octubre, unas 70 personas se concentraron a las puertas de la Oficina de Extranjería de Madrid para denunciar que el sistema de citas para solicitar el arraigo o la reagrupación familiar, entre otros trámites, está funcionando de forma nefasta y las personas extranjeras tienen que esperar entre 3 y 7 meses para conseguir una cita.
Muchos ciudadanos afectados
Según el Defensor esta ausencia de citas afecta de modo similar a todo tipo de trámites relacionados con ciudadanos extranjeros: menores de edad, ciudadanos comunitarios y sus familiares, extranjeros en régimen general de extranjería o solicitantes de asilo.
Además, puntualiza que, en las actuaciones iniciadas con distintas delegaciones y subdelegaciones del Gobierno, se les ha comunicado que el origen del problema es la ausencia de medios personales y materiales suficientes para hacer frente a las tareas encomendadas, lo que supone que se oferte un número de citas inferior a las necesidades existentes.
Venta de citas
Esta situación provoca, según expone el Defensor, que los interesados acudan a locutorios, gestorías y establecimientos similares donde, con medios informáticos más avanzados y que obtienen citas de manera masiva, impidiendo que los particulares puedan acceder a las mismas.
Como ya informó este diario en septiembre, el Gobierno suprimió el servicio de información presencial en extranjería y cerró una oficina. Tras ello, la Red de Colectivos Antirracistas denunció que las consultas en ventanilla se sustituyen por el sistema de cita previa y un correo electrónico de forma que se acababa la información presencial para los extranjeros que no disponían de cita previa.
