Aunque octubre no ha acabado, la Navidad asoma dentro del debate político. Por ello, la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, defendió que salvar la Navidad «es que esté todo el mundo en la mesa», aunque no se trate de «la misma mesa».

La líder de Compromís no descartó un cierre perimetral de la Comunitat, con el argumento de que si con ello se garantiza que el virus no se expande y se protege la vida y la salud de las personas, «para mí será una medida necesaria y se deberá poner en marcha».

Oltra rechazó a utilización de la dicotomía entre salud y economía considerando que es falsa, como confirman los expertos ya que sin salud no hay economía, y prosiguió «que nadie se crea que vamos a salvar la economía si no salvamos la salud y la vida».

La vicepresidenta del Ejecutivo abogó por la adopción de cualquier medida que frene la expansión del virus declarando que a los políticos no les debe temblar el pulso a la hora de tomar decisiones, porque «más vale un tiempo de restricciones mas contundentes que estar siempre dudando».

Oltra añadió que los políticos no deben generar «un pozo de tristeza y desesperanza en la gente» porque cuando creen que ya se ha acabado, vuelve a empezar.

Por ello, afirmó que se debe acabar con el virus de forma radical porque la gente «lo quiere ver ya es el final del túnel y si para ello se necesitan medidas más contundente se deben adoptar».