La tormenta descargó con fuerza en la comarca de l’Horta desde la madrugada del jueves, si bien los problemas más graves se vivieron a primera hora de la tarde. El punto más conflictivo se registró en Picassent. En el municipio de l’Horta Sud se recogieron más de 200 litros por metro cuadrado.

Entre las dos y las cuatro de la tarde, los núcleos de precipitación procedentes de la Ribera, dejaron tan cantidad de lluvia que el canal Júcar-Túria se desbordó, inundando los caminos rurales, ya de por sí cubiertos de agua.

La Policía Local tuvo que cerrar media docena de viales, entre ellos, las entradas y salidas de dos colegios: la Comarcal y les Carolines, situados en zonas diseminadas de Picassent. Más de 800 alumnos se vieron confinados en las aulas durante varias horas, a la espera de que, finalmente, al remitir la lluvia y con la bajada del nivel de los caminos, la Policía guiara a los autobuses hasta las salidas. Más suerte tuvieron algunos padres, con domicilios cercanos o con conocimiento de las rutas alternativas, que sí pudieron recoger a sus hijos con sus coches particulares. Mientras, los alumnos, tal como señalaron desde ambos centros docentes, aprovecharon para hacer deberes o pasaron el tiempo con actividades improvisadas de lectura, baile o plástica.

La amenaza del cunetón

El otro momento de cierta tensión por las fuertes precipitaciones se produjo en Aldaia. El ayuntamiento, sobre las cinco de la tarde, procedió al cierre de los tres túneles de acceso al municipio, bajo las vías del tren, debido a los más de 100 litros recogidos en pocas horas. La persistencia de las precipitaciones causó el desbordamiento del cunetón, una infraestructura ejecutada en 2017 por el Consell, que desvía el cauce del barranco de la Saleta, aguas arriba, al barranco de Torrent. Una hora después el nivel del cunetón fue descendiendo y la normalidad se fue recuperando poco a poco.

El frente de precipitaciones, que recorrió la comarca de sur a norte, dejó un balance, según Avamet, de 182 litros en Albal, 178 en Silla, 172 en Catarroja, 163 en Beniparell, 147 en Sedaví, 177 en Torrent, 126 en Xirivella, 97 en Almàssera, 96 en Tavernes Blanques y 88 en Albalat dels Sorells. Las fuertes trombas en poco tiempo causaron inundaciones en algunos calles de municipios como Torrent, en todo el entorno de Parc Central, Silla, en la rambla de la Independencia, o Albalat dels Sorells, donde se tuvo que cortar la calle Mayor por el alto nivel de agua. Además se vivieron imágenes de coches arrastrados por los barrancos de Paiporta y Picassent, lamentando solo los daños materiales.

En el resto de la comarca, las incidencias no pasaron de viales rurales cortados, así como pasos inferiores o accesos en las zonas marítimas de Alboraia o Puçol, o la actuación de Bomberos y servicios municipales por la caída de árboles. Manises y Burjassot decidieron cerrar los parques desde primera hora. Por último, la tromba que cayó al mediodía dejó el paseo marítimo de la Patacona convertido en un autentico río.