El Servicio Audiovisual Diocesano de la Archidiócesis de Valencia ha realizado un documental sobre el milagro eucarístico presenciado en 1392 por la venerable Inés de Moncada, que con tan sólo cuatro años y medio de edad, vio varias veces el día de Navidad al niño Jesús y, años después, se retiró en su juventud a vivir apartada en oración en una cueva de la sierra Calderona hasta el final de sus días.
El documental, ya disponible en el canal Youtube de la Archidiócesis de Valencia, ha sido realizado con motivo del Día Jubilar concedido a la parroquia de San Jaime Apóstol de Moncada, donde sucedió el milagro eucarístico, y dentro del Año Santo Jubilar del Santo Cáliz, que desde el pasado 25 de octubre se celebra en toda la archidiócesis de Valencia.
De la mano de Javier Grande, párroco de san Jaime Apóstol de Moncada y de Juan Huguet, vicario parroquial, el documental recorre el lugar donde estuvo emplazada la casa natal de la Venerable Inés, en la calle Mayor de Moncada. También la capilla de la Comunión de la parroquia de san Jaime Apóstol, donde pudo acontecer el milagro, pues es la parte más antigua de la parroquia actual y anteriormente formó parte del antiguo templo gótico.
Igualmente, el documental de unos trece minutos de duración, se adentra en la sierra Calderona, con el escenario de fondo de la Cartuja de Porta Coeli, donde acudió la Venerable Inés después de sentir la llamada a consagrar su vida, y finalmente visita la llamada “coveta de la Venerable Inés”, donde la joven se recluyó hasta el final de sus días, renunciando a todas las riquezas que le brindaba su herencia.
El milagro eucarístico de Moncada
El 25 de diciembre del año 1392, la niña Inés de Moncada, según la tradición, en el momento de la Consagración, vio a un hermoso niño en la forma consagrada. “¡Mira, mare, el xiquet!” le dijo a su madre, que no le hizo caso, pero la situación se repitió en las siguientes misas, por lo que la madre optó por contárselo al párroco.
Se da la circunstancia de que aquel milagro eucarístico, en presencia de numerosos testigos, ocurrió en pleno cisma de Occidente, un periodo de división dentro de la Iglesia que comenzó con la proclamación de dos Papas, Urbano VI y Clemente VII, y que había conducido a que muchos sacerdotes ordenados por la línea de uno u otro Papa dudaran sobre la validez de su ordenación y por tanto de la eficacia de sus sacramentos. Entre ellos estaba el entonces párroco de Moncada, Mosén Jaime.
Al escuchar el testimonio de la niña, el párroco quiso poner a prueba la revelación ante varios testigos. Tomando una forma consagrada y otra sin consagrar, preguntó a la Venerable Inés, varias veces mientras las alternaba de espaldas a ella, dónde veía al Niño. La niña señaló en todas las ocasiones sólo a la forma consagrada. “Todos quedaron maravillados, y el sacerdote entendió el signo como una confirmación de la validez de los sacramentos y de la presencia real de Jesús en la eucaristía”, ha relatado Javier Grande, párroco de San Jaime Apóstol de Moncada.
Día Jubilar
La parroquia de San Jaime Apóstol de Moncada había previsto para el pasado 27 de diciembre, un Día Jubilar, en el marco del Año Jubilar Eucarístico del Cáliz de la Pasión, y con motivo del milagro eucarístico que presenció la venerable Inés, pero tuvo que ser aplazado debido a un importante incremento del coronavirus y se celebrará el próximo 27 de junio.
Dentro de la proclamación del Año Jubilar del Santo Cáliz, que celebra este año la diócesis de Valencia, está previsto que las parroquias donde han acontecido milagros eucarísticos puedan ser templos jubilares durante el día de la fiesta del milagro, por su vinculación con la Eucaristía y el Santo Cáliz. Así, además de Moncada, está previsto que celebren también un Día Jubilar en Alcoi, Llutxent, Silla, Alboraia y Almàssera.
