La petición del president de la Generalitat de recibir más vacunas de Pzifer de las inicialmente pactadas a partir del próximo lunes tiene un claro por qué: desde ayer en varios hospitales valencianos han tenido que ralentizar el ritmo de vacunación o incluso pararlo porque, simplemente, no quedan más vacunas que poner hasta el lunes.

Según las cifras oficiales del Ministerio de Sanidad, hasta ayer la C. Valenciana había inoculado el 85,2 % de las 94.350 recibidas de Pzifer y Moderna, el 88 % de las recibidas de Pzifer, de las que quedan unas 10.800. El problema es que no hay intención de ponerlas todas porque, por una cuestión de prudencia, se quiere dejar al menos de reserva las que serían necesarias para que la semana que viene se pudiera completar el ciclo de la segunda dosis a las cerca de 6.000 personas que se vacunaron en la primera semana con la de Pzifer y que deben recibir otro pinchazo a los 21 días.

De ahí que, realmente, para inocular hoy, de Pzifer puedan quedar unas 4.000 o menos, cuando el ritmo de los últimos días era de 10.000 o incluso de 13.000 vacunas inoculadas al día una vez que la conselleria aceleró al incluir al personal sanitario de centros de salud y de hospitales a partir del 8 de enero.

De hecho, ese viernes y el fin de semana siguiente, en el que se estuvo vacunando, se pusieron 29.709 dosis en tres días. El 11 de enero se pusieron más de 11.000 y otras 13.600 al día siguiente. A este ritmo, el envío semanal no duraría más que tres días o menos, teniendo en cuenta que se reserva para la segunda dosis.

Esta carestía de viales ha hecho que en hospitales como en el de Llíria o el Arnau hayan reducido el ritmo de vacunación porque las han puesto casi todas «y hasta la semana que viene no recibirán», según han explicado fuentes sindicales de Comisiones Obreras. Lo mismo ha pasado, por ejemplo, en el hospital de Gandia, donde fuentes sindicales aseguran que las vacunas se han acabado y no llegarán más hasta que el lunes la C. Valenciana reciba el contingente de 31.000 dosis nuevas que tiene adjudicadas. En el hospital Clínico de Valencia según fuentes oficiales se sigue vacunando aunque según fuentes sindicales a un ritmo mucho más reducido y de hecho desde USO e Intersindical denuncian la «mala planificación» después de que se hayan anulado citas dadas para el miércoles.

Un 2 % de negativas

El porcentaje de personas que han dicho no a la vacuna se mantiene en torno al 2 %, ya que hasta el día 13, se han negado a inmunizarse 1.466 personas, según datos oficiales, la mayoría personal sanitario. Según el calendario oficial, la próxima semana se empieza ya con la segunda dosis en residencias y se seguirá vacunando a los sanitarios con previsión de poner 38.000 dosis.

Tras cubrir estos grupos y el de grandes dependientes llegará el turno de los sanitarios de la privada que trabajan en hospitales, farmacias, consultas privadas. El orden de priorización será también el de primera línea y el resto, no por colectivos profesionales, como ayer publicó por error este diario.