Apenas 7 días han bastado para que abril haya dado una vuelta a la situación meteorológica. Debe ser por eso que se refieren a este mes como el mes de los grandes cambios y se le atribuyen decenas de dichos populares y refranes. Para la segunda quincena de abril se esperan lluvias, pero esta vez de estrellas fugaces. Si la meteorología lo permite, durante las próximas semanas disfrutaremos de las Líridas y de la superluna rosa que pondrá la guinda del pastel casi a final de mes. La lluvia de estrellas Líridas serán visibles desde el hemisferio norte entre los días 16 y 25 de este mismo mes. Como sucede con otras estrellas fugaces, estas son trozos de un cometa llamado C/1861 G1 (Thatcher) que órbita alrededor del Sol una vez cada 415 años. Cuando la Tierra atraviesa un anillo poblado de estos fragmentos, estos mismos se cuelan en nuestra atmósfera y se desintegran por la fricción del aire. A nuestros ojos se ve como resplandor luminoso que viaja por el cielo y que conocemos como estrella fugaz. Las Líridas son bastante modestas, ya que su tasa de actividad media suele ser de 18 meteoros por hora viajando a velocidades de 49 kilómetros por segundo. Este año, la observación de estos meteoros no será del todo buena, ya que la Luna se encontrará en su fase de cuarto creciente. Todo esto según el Observatorio Astronómico Nacional. Por ello, el 27 de abril podría ser el día más esperado para los amantes de la astronomía y del cielo nocturno. Esa misma noche, nuestro satélite estará en su fase de luna llena y, además, en su perigeo. Esto quiere decir que será el momento exacto en el que la Tierra y la Luna se encuentren geocéntricamente más cerca, aproximadamente a 357.378 kilómetros. En el mejor de los casos, ambos eventos astronómicos se podrán ver desde el cielo siempre y cuando busquemos un lugar sin obstáculos visuales. Lo más probable es que nos quedemos con ganas de más después de observar las Líridas, es por ello, que lo mejor será esperar con ansias la superluna rosa, ya que con ella en el firmamento nadie es rival.