La vacunación masiva contra el coronavirus ha comenzado en la Comunitat Valenciana. Las vacunas comienzan a llegar y esta semana se avecina como histórica en cuanto a dosis administradas. Acaban de llegar más de 150.000 vacunas de Pfizer a la Comunitat Valenciana y todo apunta a que la EMA dará luz verde al uso de la vacuna monodosis de Janssen. En total, los vacunódromos valencianos y los puntos especiales de vacunación habilitados en las principales ciudades valencianas recibirán también miles de dosis de Moderna y AstraZeneca para seguir adelante en la inmunización contra el coronavirus.

Todos sueros autorizados por Europa y por el ministerio de Sanidad son seguros. Toda las vacunas han demostrado su efectividad frente al virus y su uso, aunque solo sea con una sola dosis en el caso de aquellas que requieren dos, es suficiente para atajar el avance del virus, tal como confirma la evolución epidemiológica en países donde la vacunación ha avanzado más rápidamente que en el viejo continente, como Israel o Reino Unido.

Sin embargo, son muchos los pacientes con dudas, incertidumbres y miedos sobre la vacuna. Los expertos coinciden en que las vacunas reportan muchos más beneficios que riesgos y recuerdan que, aunque todos los medicamente tienen un porcentaje mínimo de efectos secundarios, todos ellos son tratables y controlables.

Las dos vacunas que más dudas están despertando entre los ciudadanos son las de Janssen y AstraZeneca. Las dos se han relacionado con la aparición de tromboembolismos entre quienes se inocularon con ellas.

Alérgicos y las vacunas contra el coronavirus

¿Se deben vacunar los alérgicos? La respuesta es sí. Las alergias son patologías asociadas a reacciones inmunes muy fuertes a determinados alérgenos o componentes químicos presentes en el entorno o los alimentos, no a todo el entorno ni a todos los productos. En estos casos, los pacientes con alergias detectadas a algunos de los componentes de la formulación de cada una de las vacunas deberán suministrarse aquella que no lo contenga. Por ejemplo, las vacunas de Moderna y Pfizer incluyen una compuesto llamado polietilenglicol, o macrogol. No es un producto específico de estas vacunas y también está presente en otros fármacos, como por ejemplo laxantes. Cualquier alérgico a este compuesto tendría una reacción anafiláctica no solo ante la vacuna sino también ante el laxante que lo contiene.

Por ello, Sanidad recuerda que los pacientes con alergias severas deben consultar con sus médicos de familia o al personal que lo cite para que, de acuerdo, con sus historiales médicos, decidan qué vacuna es más aconsejable de entre todos los sueros autorizados.

El último informe de farmacovigilancia de la la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios recoge que los efectos secundarios más frecuentes de las tres vacunas que hasta ahora se han suministrado en el país son pirexia, cefalea, mialgias y dolor en la zona de inyección.

Otras patologías como enfermedades autoinmunes

Hasta ahora ninguna autoridad sanitaria contraindica la recepción de cualquier vacuna frente al coronavirus en enfermedades autoinmunes. La OMS, por su parte, tampoco contraindica ninguna vacuna en las personas con trastornos autoinmunes. Las sociedades médicas se han posicionado a favor de la vacunación de los pacientes con enfermedades autoinmunes o en tratamiento inmunosupresor aunque también recomiendan que habrá que consultar previamente a su médico habitual, con el fin de asesorar sobre el mejor momento para llevar a cabo la vacunación, en función de la fase de la enfermedad en la que se encuentre y también en función del tratamiento que está recibiendo en ese momento.