El aumento de las temperaturas asociadas con el calentamiento global provocará en los próximos años un incremento de las precipitaciones intensas de corta duración, inferiores a las 3 horas. Según la ley de Clausius Clapeyron la cantidad de vapor de agua aumenta con la temperatura, por lo tanto a pesar de que a mediados del siglo XXI se prevé un clima con menos cantidad de precipitación en la cuenca mediterránea cuando haya precipitaciones fuertes estas serán más intensas que en la actualidad. En artículos científicos indexados ya se ha estudiado este comportamiento de las precipitaciones intensas, aunque no se ha observado de forma general un aumento del número de días de precipitación intensa, si que en muchos observatorios hay un incremento de la frecuencia de las precipitaciones intensas de corta duración. Este incremento se ha observado en ciudades costeras de China pero también en otros países del mundo. Este aumento de este tipo de precipitación se debe tener en cuenta a la hora de planificar las ciudades y hacer avisos meteorológicos para disminuir el número de víctimas mortales asociadas a este tipo de precipitación . El incremento de la superficie impermeable asociada con la urbanización, especialmente de las zonas costeras, donde se concentran la mayoría de las ciudades a nivel planetario, junto con la subida del nivel del mar, incrementará el riesgo de inundación en estas áreas cercanas al mar. Desde las diferentes administraciones, estatales, autonómicas y locales deben hacer políticas para disminuir este riesgo de inundación impidiendo la urbanización de zonas cercanas a la playa y también en áreas cercanas a cursos fluviales, especialmente en las ramblas y torrentes mediterráneos, que sólo llevan agua durante las lluvias torrenciales. Estos cursos discontinuos de agua implican mucho riesgo de inundación en la fachada oriental del litoral español y también son un riesgo para la vida de las personas que no viven de forma permanente: En algunos artículos científicos se hace patente que la mayoría de víctimas de las inundaciones en la vertiente mediterránea de la Península Ibérica son personas extranjeras que desconocen el riesgo asociado a las inundaciones repentinas o flash flood, asociadas a lluvias intensas y de corta duración, que son típicas de las tormentas mediterráneas de finales de verano e inicios del otoño.